Un ángel letón
A poco que uno preste atención, Dios siempre se sirve de algo para llevarte hacia él. Te manda ángeles, para que se cumpla su promesa del libro del Exodo: mi ángel marchará delante de ti. “Ángel” es, etimológicamente, una palabra griega, ἄγγελος (pronunciado anguelós), que significa simplemente “mensajero”, es un mensajero de Dios. El mismo sentido tiene el término hebreo del que es traducción la palabra ángel: מלאך (malaj).
Como indica su nombre, lo importante es su mensaje, no ellos. Cuando el arcángel Gabriel, el portador de la misiva más importante de la Historia, se apareció a la Virgen, no comenzó presentándose, sino que humíldemente se limitó a entregarle el mensaje de Dios: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo…. Lo mismo nos muestra otro arcángel, San Miguel, cuyo nombre es una proclamación de la grandeza divina, pues significa, en hebreo, “¿Quién como Dios?".