El mapa del tesoro
Desde pequeño, me han fascinado los mapas. Si uno lo piensa un poco o, mejor, lo mira con los ojos llenos de admiración de un niño, resulta emocionante que montañas altísimas, profundos ríos y ciudades y aldeas llenas de gente se introduzcan, como por arte de magia, en un pequeño mapa que se puede doblar y meter en el bolsillo. Por no hablar de que todo mapa está pidiendo una buena X que marque la situación de un tesoro escondido y unos cuantos monstruos en las zonas desconocidas e inexploradas.
Traigo hoy al blog un mapa lleno de X. Es el mapa de los grupos de anglicanos que ya han manifestado su deseo de pertenecer a la Iglesia Católica en los nuevos ordinariatos anglocatólicos de Estados Unidos y Canadá. Cada uno de ellos es un tesoro para la Iglesia. Y un tesoro desconocido hasta ahora para nosotros, que el Papa Benedicto XVI se ha molestado en buscar y en excavar.