Sistach se fue al Caribe
Es típico de cada año que nuestro cardenal se busque una excusa para no asistir a la Fiesta de la Familia Cristiana que se celebra en Madrid. En 2007 una inoportuna gripe le obligó a guardar cama; en 2008 se sacó de la manga la celebración de la misa por la familia a nivel local (sin que en los años venideros gozase de continuidad) y en 2009 no tuvo más remedio que asistir, pues no podía hacer el feo a otros cardenales europeos que concurrían al acto. Este año era muy llamativo ver quien presidía la celebración: los cardenales Rouco, Amigo, Cañizares y García Gasco más los curiales Antonelli y Cordes. Cuatro de los cinco purpurados españoles con derecho a voto en un hipotético conclave. ¿Dónde estaba el quinto? En el Caribe. Sí, sí, en el Caribe. En la misma República Dominicana. La excusa que ha hallado Sistach este año para no asistir a la Plaza de Colón ha sido un viaje a la República Dominicana. Y no se crean que se trata de un viaje relámpago, sino propio de todo un señor cardenal. Once días en la antigua isla La Española. Del 30 de diciembre al 9 de enero. Incluso pudo despedir el año a más de veinte grados de temperatura. Muy lejos de los rigores invernales madrileños.