Fiasco absoluto del Tots cap a Lleida
Llamaron a somatén: Tots cap a Lleida! Y no fue casi nadie. 500 personas, según los cálculos más optimistas. Eso que habían puesto todas las facilidades del mundo: Autocares desde Barcelona, Gerona, Mataró, Reus y Tarragona. Gratis. Solo la voluntad. Ni por esas. La representación política también fue exigua: Puigcercós y cuatro políticos locales. Por cierto, ninguno del PSC y ningún cargo municipal. Ridículo estrepitoso. Pero –cucos que son- han silenciado la manifestación “a posteriori”. Aparte de los medios ilerdenses, solo el Avui informó sobre ella. Silencio absoluto, sabedores del evidente naufragio.
¿Para eso tanto ruido? ¿Tantas energías despilfarradas? ¿Tanto tiempo que se podía haber dedicado a tareas más provechosas? Está claro que –como suele pasar en este país- por un lado van los medios y por otro lado va el personal de a pié. Se han cansado de hablar de la polémica sobre los bienes de La Franja y el Museu de Lleida, convocan una manifestación, a todos los catalanes (no solo los de Lérida) y van 500. Es lo que se llama arraigo popular.