Los consejos de González Pons.
Esteban González Pons ha devenido en Estebanillo González, protagonista de una de las últimas novelas picaresca, género tan español, por otra parte. Ha aconsejado a la Iglesia que no es momento de cuitas con el PP, sino de apoyarlo, como si ésta fuera (o fuese) esclava de un partido político.
No es cuestión de exigirle al señor Gonzalez Pons conocimientos teológicos, pero es justo pedirle que no trate a la Iglesia como un partido político.
Es algo fácilmente entendible, incluso para un político, que la Iglesia es cuerpo místico de Cristo, pueblo de Dios, misterio, templo del Espíritu Santo y sacramento universal de salvación. Lo que no es, lo siento D. Esteban, es un miembro/a, apéndice de un partido político. Menos aún del PP.