Muchas respuestas a una buena pregunta
Quaestio Quodlibetalis 13. Hace unos días, escribí sobre el Buen Ladrón, San Dimas, resaltando la misericordia gratuita de Cristo, que le promete el paraíso por un instante de arrepentimiento en el último instante de su vida. Ante estas afirmaciones, un lector, no sin razón, preguntaba:
“De lujo no? toda la vida robando y asesinando y al final, por estar en el sitio correcto en el momento indicado, ale, al paraíso limpio a disfrutar. Moraleja: no te preocupes, haz el mal, pero arrepiéntete en tu lecho de muerte, que Dios misericordioso te salvará.”
Antes de lanzarme a responder, me pareció una buena idea pedir a los lectores que diesen su opinión. No sería justo decir que la variedad y profundidad de las respuestas recibidas me han sorprendido, porque la calidad de los lectores de este blog es de sobra conocida. Sí que diré, en cambio, que me he sentido justamente orgulloso de mis lectores, de lo sustanciosas que han sido sus respuestas y de cómo han sabido identificar, sin vacilar, los puntos fundamentales de la cuestión. Como verán, he recogido todas las respuestas en este extenso artículo, que toca muchos puntos esenciales de la vida cristiana.