La Trinidad y la gente sencilla
En torno al artículo de ayer, un lector habitual de este blog, Juan Antonio, escribió un comentario que me pareció muy interesante y, que, a su vez, suscitó muchos otros comentarios. Juan Antonio es físico y tiene bastantes artículos publicados sobre temas físicos en diversas revistas científicas.
Hablando de lo difícil que es entender el amor al enemigo, hizo alusión a la doctrina de la Trinidad y recordó que hay gente que dice que “en la Iglesia a las contradicciones se les llama misterios y todo resuelto”. En realidad, esa actitud es una muestra de la gran ignorancia que tiene nuestra sociedad en lo relativo a los misterios cristianos, que no son ni pueden ser algo contradictorio.
Un claro ejemplo es el desconocimiento que tiene la gente del dogma fundamental de la fe cristiana: la Trinidad. Los cristianos no creemos en un Dios que es uno y tres a la vez en el mismo sentido, ya que eso sería un absurdo. Los cristianos creemos en un Dios que es tres personas y una sola naturaleza, es decir, que es tres y uno en sentidos diferentes: tres “quiénes” en un sólo “qué”.
Esto, si bien no es contradictorio, sin duda supera nuestro limitado intelecto, ya que las personas que estamos acostumbrados a encontrar tienen una sola naturaleza: a un ser humano le corresponde una sola persona. En cambio, en el único Dios que existe, hay tres personas diferentes, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Si lo pensamos detenidamente, es razonable que la forma de ser de Dios, por su propia naturaleza, no quepa en nuestra inteligencia humana y constituya un misterio (no un absurdo).
En ese sentido, Juan Antonio ofreció un ejemplo de realidad material que es, a la vez, uno y tres, en sentidos diferentes, dentro del grupo matemático de las simetrías de partículas fundamentales. En este grupo, existen diversos estados: singlete, doblete y triplete. Estos últimos, los tripletes, están formados por tres partículas diferentes, pero que constituyen un todo integral e indisoluble.
Un aspecto atractivo de este ejemplo consiste en que las partículas elementales desafían nuestra intuición y se comportan de forma muy distinta a lo que estamos acostumbrados a ver a nuestro alrededor. Esto debería abrirnos los ojos, para entender que algo tan remoto a nosotros, desde el punto de vista de la naturaleza, como es Dios, forzosamente tiene que sorprendernos y descolocar nuestra forma habitual de pensar. Como decía Juan Antonio, “ya la realidad “física” es una cosa diferente de las construcciones matemáticas que inventamos para intentar entenderla, que a veces se ajustan a ella y a veces no. Por tanto, cuánto más Dios, al que ni vemos ni tocamos ni podemos manipular a voluntad”.
No es esta la primera vez que se han buscado ejemplos materiales que puedan ayudarnos a vislumbrar la Trinidad. San Agustín hizo algo similar, desde el campo de la filosofía, comparando la Trinidad con las tres potencias fundamentales que tiene el ser humano: entendimiento, memoria y voluntad. Estas tres potencias son algo real y se diferencian claramente unas de otras: es muy diferente querer algo que entenderlo o recordarlo. Sin embargo, las tres permanecen unidas en una única naturaleza humana. “¡Mira! El alma se recuerda, se comprende y se ama; si esto vemos, vemos ya una trinidad; aún no vemos a Dios pero sí una imagen de Dios” (De Trinitate XIV, 8, 11).
Otros santos han buscado imágenes aún más sencillas. Se dice que San Patricio, al evangelizar Irlanda, explicó la doctrina del Dios trino y uno utilizando una pequeña planta muy común en la isla, el trébol con sus tres hojas en un único tallo. Aún hoy, el trébol sigue siendo el emblema de Irlanda. Dichosa la nación cuyo símbolo es una imagen de la Trinidad.
Todo esto me ha recordado a algo que me contó mi padre sobre unos días que pasó en el ambiente tranquilo de un monasterio benedictino. Coincidió con él un anciano frailecillo que había ido a aquel monasterio para pasar una temporada de retiro. El frailecillo contaba que estaba muy contento, porque le encantaba pasear por el claustro, cuyo suelo estaba enlosado con unas grandes piedras cuadradas. Cada vez que, caminando lentamente, llegaba a la intersección de cuatro losas, se acordaba de la Cruz de Cristo y rezaba una pequeña oración. Eso bastaba para mantenerle contento. Los monjes benedictinos, que se creían muy modernos e inteligentes (¡Dios les perdone!), se burlaban del pobre frailecillo por estas cosas, que les parecían tonterías. Cuando el frailecillo decía que era muy devoto del Corazón de Jesús, ellos intentaban escandalizarle diciendo que eran muy devotos del bazo de Jesús o de sus riñones. Se reían de la fe sencilla de aquel fraile, pero a mí no me extrañaría que hubiera movido montañas.
En mi opinión, todos estos ejemplos, el del anciano frailecillo, el de San Patricio y San Agustín y, también, el de Juan Antonio, son muestras de personas con el corazón limpio, que son capaces de ver a Dios en todo: dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Por supuesto, existe una distancia infinita entre tréboles, protones, facultades del alma y la Trinidad y, como recordaba otro comentarista, Rasenjo, citando a San Agustín, si comprendiésemos totalmente el misterio de Dios sería que nos habíamos equivocado y no era Dios en lo que estábamos pensando.
Aunque el ejemplo de Juan Antonio, por su propia naturaleza, era complicado, no es necesario saber mucho para encontrar a Dios en lo que nos rodea. Cada uno puede encontrarlo en las cosas que tiene más cerca: los físicos en la Física, los filósofos en la Filosofía y los cocineros entre los pucheros, como decía Santa Teresa. Así nos lo mostró el Señor: Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla.
Las huellas de Dios están por toda la creación, gritándonos que miremos a Dios, que no cerremos nuestros ojos ante él y que nos unamos a su alabanza: el cielo proclama la gloria de Dios el firmamento la obra de sus manos.
33 comentarios
Quiero agradecerte tu ejemplo de las rotaciones. Hacía tiempo que te pedía que escribieras algo y justo lo hiciste en un día que he tenido que estar desconectado.
De todas formas, ya veo que el interés suscitado ha hecho que no faltaran lectores que lo comentaran. Creo que es uno de los días que más comentarios ha habido sin que fuera una pelea. :)
Un saludo.
Ha sido una imprecisión mía, tenía que haber puesto algo así: "como recordaba rasenjo" o "como citaba rasenjo". Ahora lo dejo claro.
También quería haber citado los demás ejemplos que dabas para vislumbrar a la Trinidad en el mundo creado, porque me parecieron muy interesantes, especialmente la analogía familia-Dios, pero ya se me había hecho demasiado largo el artículo. Otro día será.
Un saludo.
También quería comentar que aunque no podamos entender a Dios, podemos (casi que debemos) intentarlo. Sobre todo para cuando alguien nos venga con objeciones, como al hijo de RNA.
Estuve leyendo la crítica que uno de esos ateos profesionales (creo que se llama Sam Harris) hace del libro de Collins que mencionó Fredense. El tal Harris se reía de que la conversión de Collins había tenido lugar cuando había contemplado una espectacular cascada con 3 brazos, que le habían recordado la Trinidad. Y afirmaba que él (Harris) también la había visto y no se había convertido.
Realmente esto es de ser g*l*p*ll*s (me censuro yo mismo la palabra). Si yo me enamoro de una chica por su sonrisa, ¿quiere decir que todo el que vea su sonrisa se tiene que enamorar? Vamos...
Primero decir que me parece muy reveladora y acertada.
Segundo, de alguna manera - analógica- el principio de indeterminación de Heisenberg en mecánica cuántica es en física lo que en la teología cristiana el misterio de la Santísima Trinidad. Y salgo al paso del prejuicio que siempre se arroja sobre los misterios cristianos (contradicción, oscuridad), pues la naturaleza tiene los suyos y la lógica matemática también y sino que se lo pregunten a Gödel. Del misterio lo que conviene no es el desprecio sino la contemplación de su profundidad. Lo mismo en la materia, ha resultado ser más compleja y misteriosa de lo que habíamos pensado, pero a la vez fascinante, lo mismo Dios.
El misterio provoca, es para hacerse preguntas. ¿Por qué la materia ha de seguir en su organización electrónica el principio de exclusión de Pauli por narices? Pues lo sigue y parece arbitrario. Sería el caos y no existiríamos tampoco nosotros aquí.
Puede ser que S. Agustín se encontrara, 16 siglos antes que Heisenberg con el electrón, con la indeterminación teológica de Dios y se dio por vencido.
Si Heisenberg reduce el electrón a un producto matricial de números probabilísticos- que los físicos me corrijan- y llega a la conclusión que es imposible determinar con precisión simultáneamente la posición y la cantidad de movimiento, marca para siempre una limitación a nuestro conocimiento determinista: al electrón tampoco nadie le ha visto nunca y, es más, jamás nadie lo podrá hacer (tal principio es inviolable).
Pero es que esto, si no estoy muy errado, me lleva a pensar otra cosa más en común. Heisenberg introduce en la física por primera vez que nunca más se pueden hacer imágenes físicas del átomo, no hay modelos físicos visuales: el átomo de Bohr con todo muy ordenadito y bien dispuesto no es la realidad, sólo modelos matemáticos. Aunque sigamos haciéndonoslas pero ya sabemos que son como si… Análogamente pasa con el pensamiento de S. Agustín: “si comprehendiste, no es Dios”. Hay una teología medieval que se llama apofática o negativa, la del maestro Eckhart, muy sugestiva, que ante la tentación idolátrica, de hacerse imágenes falsas de Dios aunque fuesen éstas muy filosóficas, puesDios sería más, en su austeridad sólo afirma lo que Dios no es. Y se comprende dado que todos nuestros conceptos se forman sobre la experiencia sensible de las cosas mundanas, pues bien, lo que ellos expresan es justamente lo que Dios no puede ser.
Algunos ateos profesionales que son además eso autocensurado no saben que a Collins es Dios mismo quien le convierte no las mediaciones. El poder de cambiar a una persona es la revelación de Dios mismo no las mediaciones : una cascada, una sonrisa, la experiencia del dolor, la mirada inteligente a la naturaleza, la pregunta honrada y sincera por el sentido... Es Dios no esas cosas, esas cosas son la gramática que utiliza Dios después de preparle la mente y el corazón limpio que se va dejando sorprender por el misterio hasta que Dios se hace transparente, y ya todo revela a Dios. Y quedará tan prendado que Dios cambiará la sintaxis de su biografía de forma definitiva y significativa.
Será porque Juan Antonio da la impresión siempre de hablar como un amigo. Y a llos amigos se les escucha siempre con atención y se les intenta comprender. :)
Además en esto de la Trinidad no puedo estar más de acuerdo con todo el mundo. (aunque tengo un pequeño lío en el blog de LF, con Yahveh, Alá, y la Trinidad, que no sé bien hasta qué punto se pueden identificar o no)
Hasta mañana.
Rasenjo, eso que dices de Eckhart y la teología apofática es precisamente un argumento usado por algunos para negar que se pueda decir que Dios es Padre Hijo Espíritu, o que Jesús sea el Hijo de Dios, Dios encarnado. Dicen que creemos que "sabemos" y decimos demasiadas cosas sobre Dios y que no deberíamos decir que Jesús es La revelación de Dios, o el rostro humano de Dios, que Jesús fue un hombre que tuvo una gran experiencia de Dios y la resumió llamándole Abba sin más filosofías. Eso de la unión hipostática, las dos naturalezas etc. es demasiado catafatismo, según ellos.
Por eso, me ha chocado que Rasenjo hable de Eckhart y apofatismo, cuando estamos hablando de la Trinidad.
Ahora sí, buenas noches.
Quizá el post que tengo pendiente sobre si el Islam es una herejía del cristianismo ayude a aclarar algo ese tema.
En cuanto a lo del apofatismo, bien entendido siempre es parte de la Teología católica sobre Dios. Lo que sucede no es tanto que no podamos decir cosas verdaderas sobre Dios, como que es Padre, Hijo y Espíritu, que es bueno, que es la Verdad, etc., sino más bien que todas esas cosas que decimos de Dios, siendo verdaderas, se quedan infinitamente cortas de la realidad.
Por ejemplo: que Dios es malo es falso; que Dios es bueno es verdadero, pero recordando siempre que entre nuestro concepto de bondad y la Bondad de Dios hay mucha más distancia que entre las casas de construcciones que hace mi hija y el Empire State. Lo mismo pasa con todo lo que decimos sobre Dios.
Esta distancia, que no excluye que Dios se haga cercano, es especialmente evidente en la mística, sea de Eckhart o de San Juan de la Cruz.
Un saludo.
Ya está cambiado.
Está claro que podemos y debemos aprender mucho sobre Dios. Estudiar Teología es lo más bonito que hay, porque se ocupa de lo que verdaderamente importa. Más aún, una parte esencial del cielo será tener toda la eternidad para disfrutar de aprender más cosas sobre Dios.
Todo eso no quita que seamos conscientes de que todo lo que sabemos sobre Dios, siendo verdadero, apenas es nada en comparación con la realidad.
Cada cosa que decimos de Dios es como la asíntota de una hipérbola. Sabemos donde está la asíntota con más o menos precisión, pero la función en ese punto se nos escapa siempre.
A mi juicio, todo buen científico, para serlo, tiene también que ser muy humilde. Al igual que todo buen teólogo o filósofo.
Un saludo a todos.
lo que dices es correcto aunque los ejemplos que das confunden un poco.
Quizás por deformación profesional no veo nada extraño en el principio de indeterminación. Y aparte de eso, la indeterminación no te dice que no puedas conocer cómo es el electrón, sino dónde está exactamente. Pero eso tampoco es un gran problema si no eres muy tiquismiquis. Hace poco se han hecho "fotos" de los orbitales de electrones en algún material, la "foto" parecía como una huevera. En realidad, un electrón es de lo mejor que puedes conocer: puedes hacer colecciones de ellos, acelerarlos, conducirlos, etc. Por eso no veo mucho parecido con Dios. Ya por curiosidad: el quark mas pesado, el "top", tiene un tiempo de vida media de unos 10^-24 segundos. Para imaginarte cuán pequeño es este tiempo, la edad del universo son 4.3 x 10^17 segundos. O sea, que la edad del universo dividida por un segundo es diez millones de veces menor que un segundo divivido por la vida media del quark. Y aunque parezca que no, se pueden aprender bastantes cosas sobre el bicho.
Y en lo del principio de exclusión de Pauli se puede ir un poquito más allá. Es consecuencia de que la función de onda de fermiones idénticos sea antisimétrica. Y debe ser antisimétrica, y no simétrica, para que la teoría sea "compatible" con la relatividad especial. Lo que nadie explica es por qué todas las partículas elementales de materia son fermiones y no hay bosones. Si fueran bosones supongo que no podríamos existir.
Yo también he estado leyendo esa discusión y parece más semántica que otra cosa. Yo siempre pensé implicitamente que quien habló a Moisés fue el Padre. Pero si no lo es, que lo expliquen.
Lo de tripletes, dobletes y singletes me ha llegado al alma, jejee. Yo también soy físico teórico(Física Hadrónica a bajas energías, http://www.slac.stanford.edu/spires/find/hep/www?rawcmd=find+a+albaladejo&FORMAT=WWW&SEQUENCE=) aunque becario todavía, y, efectivamente pienso que, si ya la misma realidad física de la que estamos constituídos, la materia, tiene un comportamiento tan anti-intuitivo, cuando menos Dios que, aunque es el fundamento de nuestro ser, a nivel material tiene que ver "poco" con nosotros.
Bruno, si oyera esto Carmen (Hernández), lloraría de ilusión, jejejeje. Yo una vez le comenté que me dedicaba a la Física, y me dijo: "Eso si que es bonito, y no las tontadas estas que dice Kiko"
Saludos.
Me parecería inadecuado utilizar esa teología para negar el Evangelio y el dato de la Revelación, ya que en principio la apofática introduce la negación como dialéctica y correctivo de la atribución y no como abolición, en ella a veces lo correctivo es tal que la misma negación es negada. En realidad es un poner en solfa todo el rato a la razón que pretende saberlo todo, quedarse como en un estado de agnosia místico por llegar/experimentar el fondo abisal de Dios. De todas formas esto me supera.
Por mi parte considero más relevante en este tema trinitario volver a la sencillez narrativa del Evangelio, visión que tú misma en el anterior blog has destacado muy bien con la mayor sencillez del mundo y no martirizarnos la cabeza con categorías extrañas y alejadas de nuestra experiencia ya tales como 'sustancia', 'naturaleza', 'hypostasis' que en nuestro contexto han mutado incluso semánticamente. Lo que sí sé es que nuestro Credo mantiene esa herencia helenística racionalista que en siglo IV estuvo de moda hasta en las discusiones en los mercados, por eso hay quien pide una readaptación a la mentalidad de nuestros contemporáneos. La inculturación helenística del cristianismo y sus categorías son prescindibles creo yo, lo relevante sigue siendo la experiencia evangélica.
No sé si te he respondido a todo, pero lo que yo suelo hacer cuando me entran dudas de todo esto volver a la cruz y lo que allí se estuvo jugando en realidad. Y porque al parecer los concilios de Constantinopla, Efeso, CAlcedonia...que desembocarían en la comprensión trinitaria, nacieron a tenor de las disputas cristológicas. A ese lugar teológico vuelvo yo. Y fuera de toda categoría metafísica me pregunto por el sentido de esa muerte y de todas las muertes y por el sentido de Dios. Sé que un Dios creíble para el ser humano sólo puede ser aquél que se moja y asume su condición de indigente, sufriente y mortal verdadera y no aparente, una kénosis real. Si Cristo no fue Dios fue un miserable más y estamos todos igualmente reducidos a una miseria sinsentido en este mundo, eso sí superdotados para nada, con aspiraciones de eternidad vacías e ilusas.¡Cuánta descompesación en el ser humano!. Dios se jugó allí su omnipotencia frente a su bondad resolviendo el dilema de Epicuro sobre el mal en el mundo sin magia. Sólo Cristo es verdadero Dios y verdadero hombre.
Lo dejo es demasiado largo.
Que disfrutes del libro de Collins. Un saludo.
Madre mía, lo que me cuentas de esas experiencias con elelextrón y demás son sorprendentes...¿A dónde piensa llegar la física?
Lo del electrón lo decía porque lo poco que sé, no se si correctamente o no, en ese mundo del microcosmos en el experimento influye el observador. Si para verlo debemos arrojar luz que indudablemente afectará a la partícula, lo que observemos será una distorsión de la realidad. En ese sentido quería subrayar esa imposibilidad o esa frontera, no lo sé. Pero, en cualquier caso, todo me parece fascinante.
Aunque lamento no haber acertado, soy consciente que ese campo me resulta más difícil extraer conclusiones aunque fueran analógicas. Gracias.
Bueno, el problema es que el Bosón de Higgs todavía no sabemos si existe, ;-)
Lo están buscando, algo así como a Roldán en su época...
Como veo un par de colegas, os cuento de qué va la cosa y vosotros mismos juzgáis qué tiene que ver el tocino con la velocidad. Algunas cosas ya os sonarán.
1) El mecanismo de Higgs es uno de varios posibles para conseguir que las partículas (electrones, quarks, bosones W y Z, etc.) tengan masa diferente de cero, porque la teoría de la que hablé, SU(3)xSU(2)xU(1) sin Higgs no permite que las particulas tengan masa. Cosa obviamente falsa.
En su forma más simple, el Higgs es un doblete (je je je) y al final de todo el mecanismo (no lo explico) aparece una partícula (a la que vosotros os referís) que es la que se busca. Por ahora se sabe que la masa es mayor que 114 GeV (1 GeV es aproximadamente la masa del protón) y se espera que sea menor que algo como 190 GeV. Hace algunos años pareció que lo vieron en un experimento pero tenían demasiados pocos datos para saber algo.
2) Evidentemente el Higgs no es el fin de la historia. Porque una teoría sólo con un Higgs es en cierta forma inconsistente desde el punto de vista teórico. Por eso hay muchas "extensiones" de la teoría que se van a buscar con tantas o más ganas que el Higgs mismo. La más popular se llama supersimetría. Y en supersimetría aparecen 2 dobletes de Higgs.
3) Y aunque se encuentre la tal supersimetría, habrá que ver por qué el grupo es algo tan curioso como SU(3)xSU(2)xU(1) y no algo más bonito como SU(5), que lo engloba. Y también habrá que entender por qué las masas de las partículas son tan diferentes unas de otras...
Dentro de un par de meses enchufan el acelerador y empezarán a buscar.
Por cierto, mikiman, yo conozco a Oller. Saludos de mi parte.
Me ha gustado mucho tu comentario.
En especial la observación de que en la apofática "a veces lo correctivo es tal que la misma negación es negada"
Eso es exactamente lo que le había dicho yo a un metafísico que en su apofática le da por negar la divinidad de Jesús, o que Dios pueda intervenir en la Historia (por mucho que le insistas en que la acción del Espíritu respeta la naturaleza de la creación y la libertad del hombre) y nos acusa a los católicos de decir demasiado sobre Dios. Digo yo que negar que Dios pueda intervenir, es afirmar algo sobre Dios, lo mismo que afirmar que puede hacerlo. Pero no hay manera. Considera intolerable que se pueda tener una opinión diferente a la suya.
A ver si acabo el de Karen Armstrong, para empezar el otro. Sí que parece interesante.
Juan Antonio,
Consigues introducirnos en un mundo que me parece mágico, aunque no entienda ni torta. No me extrañaría que RNA sí consiguiera sacar algo en claro.
Yo, después de ver "¿Y tú qué sabes? me quedé como estaba, y me entró mucha envidia de las personas que sabéis de qué va esto. Ahora Mikiman95, con el Bosón, me ha acabado de intrigar.
Fredense y Bruno,
Que disfrutéis de estos días.
Como no salga de internet estoy viendo que no leo nada más. Así que nos vemos a la vuelta.
Saludos a todos.
Muy interesante lo que decís. Voy a ver si animo a Fray Nelson a intervenir en este post. Creo que él estudió Física.
Es una serie de comentarios impresionante por la amplitud de temas, que van literalmente del cielo a la tierra. Quizás un primer servicio que quisiera prestar es ofrecer unos cuantos links que ayudan a entender el lenguaje a veces crítico de nuestros comentaristas más ilustrados y avanzados. En concreto este artículo de la Wikipedia ilustra bien sobre los bosones:
http://es.wikipedia.org/wiki/Bosón
Y este sobre el Bosón de Higgs, incluyendo la razón por la que algunos la llaman la "Partícula de Dios":
http://es.wikipedia.org/wiki/Bosón_de_Higgs
La connotación quizás más interesante es que un universo con simetría electrodébil podría cumplir con la mayoría de las leyes físicas conocidas pero sin asignar ni reconocer una masa. El bosón Higgs es el que hace distintos los fotones, que no tienen masa, de los llamados bosones W y Z, necesarios para la masa del electrón y del resto del universo, por consiguiente. Un universo así sería algo así como "pura luz," como si el Génesis se hubieradetenido en "Hágase la luz."
Aunque las cosas no son tan sencillas. Si los experimentos del CERN permiten demostrar conclusivamente que el bosón de Higgs no existe, el modelo estándar de partículas tendría que ser revisado hasta el punto de ser prácticamente descartado, de modo que la imagen del universo de sola luz es ilusorio como posibilidad incluso.
Otro punto de contacto entre esta física de partículas y el mundo de la filosofía y la teología está en la transición entre esencia y existencia, que es clave para el pensamiento de Santo Tomás, por ejemplo. Uno diría que la existencia del bosón de Higgs hace posible la existencia, por lo menos, la existencia con masa del resto del universo, y en ese sentido, sin él el universo sería pura esencia, pura posibilidad.
Sin embargo, esta es solo una analogía, porque la noción filosófica de existencia habría que aplicarla también a un universo que tuviera leyes reales y actuantes, incluso si esas leyes no aluden a la materia como tal. En comparación medieval: también un universo de ángeles y sólo ángeles requiere un Creador que los haya traído a la existencia. Paul Davies ha recuperado este aspecto de la polémica recientemente al preguntar con insistencia sobre el origen de las leyes físicas.
He echado un vistazo al link de la wikipedia, tenía curiosidad por saber la razón del nombre "la partícula Dios". Como yo decía, un científico buscando financiación... La verdad es que la página wikipedia está un poco mal traducida, pero da igual.
Nunca me había parado a pensar la relación entre el Higgs (o cualquier otro mecanismo para dar masa a las partículas) y la existencia desde un punto de vista filosófico. Aún con Higgs, a altas energías (supongo que al principio del universo, por ejemplo, aunque no puedo jurarlo) el Higgs no rompe la simetría del modelo estándar y por tanto las partículas no tienen masa. Aunque pueden existir, claro.
Por cierto, ya que hablamos de esto me parece curioso que el relato del Génesis siga prácticamente el mismo orden que la ciencia acepta.
Una puntualización: el modelo estándar no puede ser descartado así como así, ya que funciona muy bien. Lo que sí va a pasar seguramente es que se le añadirán pedacitos: nuevas partículas, simetrías mayores, etc. y el modelo estándar quedará como una "teoría aproximada" (técnicamente: teoría efectiva) válida a energías bajas. Pero es que esto seguramente sucederá haya Higgs o no. Se espera que haya algo (lo que sea) a una escala de 1 TeV. Por eso el LHC se hace con 14 TeV, para encontrarlo. Por ejemplo, el Higgs se podrá ver si pesa menos de 1 TeV.
Ya que tenemos muchos temas, saco otro más. Sabemos que en mecánica cuántica los resultados de medidas son muchas veces aleatorios (siempre dependiendo del estado del sistema que se mide). Y que no puede haber "variables ocultas" que determinen lo que va a salir, por tanto no hay ley física que prediga lo que va a salir.
Ahora bien: en estas condiciones, ¿no podríamos tener perfectamente a Dios interviniendo directamente en la naturaleza sin darnos ni cuenta? Si Dios quisiera, cuando hacemos colisionar partículas en Ginebra, puede mandar una para acá y otra para allá, sin que nosotros sospecháramos absolutamente nada. ¿Ve adónde quiero llegar?
Si la evolución, que sucede a través de mutaciones aleatorias ha sido guiada o no, creo que no lo podemos saber en base a leyes físicas. Dios puede "toquetear" lo que quiera en los procesos aleatorios, y nunca podremos decir si lo ha hecho para que salga lo que Él quiere o no. No es que yo sea partidario del diseño inteligente (tampoco se exactamente qué es), pero creo que no se puede descartar, por lo menos en base a razonamientos físicos. No soy biólogo, que me digan si me equivoco.
Existe esa posibilidad que tú dices.
La evolución es un proceso direccional claramenete evidente de mayor complejidad, organización e información sólo que a largo plazo, además de impredecible desde la teoría neodarwinista.
Los sistemas vivos considerados localmente y para períodos de tiempo más cortos el cambio más que constituir en una corriente uniforme, sigue innúmeras direcciones, incluso se dan regresiones.
El azar está presente en todo el ámbito de la evolución, desde las mutaciones y las recombinaciones genéticas hasta los impredecibles cambios del medio.
Y la selección natural no explica más que la adaptación local al medio, no garantiza ningún principio perfeccionador.
Caben tres posibles respuestas teológicas a la cuestión del azar:
1. Dios 'controla' los acontecimientos "aparentemente" aleatorios. Para nosotros quedarían indeterminados pero para Dios omnisciente no. ES aquello de que el azar es la huella de Dios cuando no quiere firmar.
2.Dios 'diseña' un sistema basado tanto en la ley como en el azar. Diseñaría el mecanismo de la acción conjunta de ley y azar que diera origen a la vida, la mente y la conciencia. Dios no interfiriría en la marcha del sistema, se limitaría a originrlo y conservarlo, ya sabe lo que va a dar.
3.Dios 'influye' en los acontecimientos, pero no los controla. Intervienen los tres: la ley, el azr y Dios. El mundo es un proceso dinámico de ensayo y error, un mundo inacado, un proceso abierto de creación y creatividad continua, en el que Dios influye permitiendo la libertad humana y la autonomía de la naturaleza.
Mañana miraré esos links de Nelson y no me enteraré de nada, pero me parecerá fascinante de todas maneras.
Hasta mañana
- Dios Hijo, Jesús, es Hombre (cuerpo y alma) y Divinidad, perfectos y diferenciados. Dios deja de ser sólo Espíritu y pasa a ser también Hombre a partir de un momento histórico y por el querer de una Mujer.
- El Hombre, si está en Gracia, es Dios por participación (no por naturaleza), es decir, el Hombre es divinizado y deificado, ya aquí en la Tierra, por acción del Espíritu Santo, adoptando la Imagen de Dios al tomar en estado de Gracia la Santa Eucaristía y desarrollar una vida santa.
- Por tanto, Dios es Hombre y el Hombre es Dios; Dios (por naturaleza) uno y trino es Hombre, y el Hombre es Dios (por participación).
- Así, Dios es también Hombre (una de las 3 personas es Dios y Hombre verdaderos) y el Hombre, si está en Gracia, es también Dios.
me sobrevaloras, lo gradezco, pero me quedo in albis al leer a J.A. Vamos, que lo paso rapidito y ni aspiro a aproximarme a ello. Hemos llegado a las 10 y creo que entre el empanamiento de los tres días de encierro y las horas que son, los comentarios de J.A. me dejan el cerebro aún más esponjiforme de lo que ya lo traigo.
Lo que no veo por aquí es a los sencillos. ¿No trataba el post de la Trinidad y "los sencillos"? Definitivamente: aquí la única sencilla soy yo ;-)
Siento meterlo aquí, pero considero importante que sepas de un acto en defensa de toda vida que se ha convocado para el Viernes 8 de Agosto en Madrid. Si quieres hacerte eco aquí tienes el manifiesto.
http://www.solidaridad.net/noticias.php?not=5248
Y la dábamos gracias y pedíamos su intercesión Y le amábamos. Y procurábamos tenerlo contento.
¡¡Qué nunca pierda la FE!
¡ Gloria a Ti Señor Jesús ! ✝️
{…} Creo que el ser humano en su semejanza con Dios, también es trinitario., con mente, cuerpo y espíritu. 🧬 {Gén 1, 26-27}
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