¿Por qué encendemos velas ante las imágenes? Nikolai de Zica
Hace tiempo, publiqué en el blog una impactante oración por los enemigos escrita por Nikolai de Zica, un obispo serbio ortodoxo de la primera mitad del siglo XX, considerado santo por los ortodoxos y conocido a menudo como el “Crisóstomo serbio". Como a varios lectores les gustó mucho, traduzco hoy otro pequeño texto del mismo obispo, acerca del significado de las velas que encendemos en la iglesia, ante las imágenes de Cristo, de Nuestra Señora o de los Santos.
Es un texto muy sencillo, pero que refleja la sabiduría de alguien que es consciente de que la Tradición de la Iglesia está llena de gestos profundísimos, que nos llevan de forma segura y directa hacia Dios. Sin duda, todos habremos encendido velas alguna vez, pero quizá no hayamos meditado con detenimiento sobre el significado de ese gesto. Y por supuesto, los paganos, que piensan que lo que hacemos es “pedir un deseo", no se enteran de nada.
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¿Por qué se encienden lamparillas ante los iconos?
1. Porque nuestra fe es luz. Cristo dijo: Yo soy la luz del mundo (Jn 8,12). La luz de la lamparilla nos recuerda esa luz con la que Cristo ilumina nuestras almas.
2. Para recordarnos la naturaleza radiante del santo ante cuyo icono encendemos la lamparilla, pues los santos son llamados hijos de la luz (Jn 12,36, Lc 16,8).
3. De modo que sirva como reproche para nosotros por nuestras malas acciones y por nuestros deseos y pensamientos oscuros; para que nos llame de nuevo al camino de la luz del Evangelio e intentemos con más fuerza cumplir los mandatos del Señor: Así brille vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos (Mt 5,16).
4. Con objeto de que la lamparilla sea nuestro humilde sacrificio a Dios, que se entregó por completo a sí mismo en sacrificio por nosotros, y un pequeño signo de nuestra inmensa gratitud y nuestro amor ardiente por Aquel al que pedimos en nuestra oración que nos conceda vida, salud, salvación y todo lo que sólo el infinito amor divino puede otorgar .
5. Para que infunda terror a los poderes malignos que a veces nos atacan incluso durante la oración y desvían nuestros pensamientos del Creador. Los demonios aman la oscuridad y tiemblan ante la luz, especialmente la luz que pertenece a Dios y a aquellos que cumplen su voluntad.
6. De manera que la luz nos empuje a entregar nuestro ser. De igual modo que el aceite y la mecha se queman en la lamparilla, obedeciendo a nuestra voluntad, nuestras almas deben consumirse en la llama del amor en todos nuestros sufrimientos, obedeciendo siempre a la Voluntad de Dios.
7. Para enseñarnos que, como la lamparilla no puede encenderse sin la acción de nuestra mano, tampoco nuestro corazón, que es nuestra lamparilla interior, podría encenderse sin el santo fuego de la gracia de Dios, aunque estuviera repleto de todas las virtudes. Todas esas virtudes nuestras son, a fin de cuentas, mero combustible y el fuego que las enciende proviene de Dios.
8. Con el fin de recordarnos que, antes que cualquier otra cosa, el Creador del mundo creó la luz y sólo después creó todo lo demás, por orden: Y dijo Dios, que sea la luz: y la luz fue (Gen 1,3). Así debe ser también al comienzo de nuestra vida espiritual, de modo que, antes que cualquier otra cosa, la luz de Cristo brille en nuestro interior. Es esta luz de la verdad de Cristo la que logrará, después, que todos los bienes sean creados, surjan y crezcan en nosotros.
¡Que la luz deCristo os ilumine también!
28 comentarios
Dicho sea al pasar: en mi diócesis no hay un solo templo donde sea posible encender una vela, no te lo permiten. Tampoco hay sustitutos eléctricos, como sí he visto en España. Pero éstos son más bien limosneros.
Ni siquiera en el Santuario Nacional de Luján, ni en el de San Nicolás es posible prender una sola vela. Los fieles se deben contentar con dejar las velas apagadas al pie del altar, las que son tomadas por los ayudantes y vaya a saber uno su destino.
Asi lo dice el grandisimo teologo Fray Antonio Royo Marin en las siguientes conferencias que se pueden encontrar en youtube y que son imperdibles;
Las Virtudes Teologales - Introducción - La Fe -
3;07;30 en adelante y
en II. La Noche Oscura en la Vida Cristiana
5;45;00 en adelante.
La Paz de Cristo.
En el cielo los ángeles, arcángeles, serafines querubines y tantos otros que en jerarquía conforman el todo creación celestial son "vivientes luminarias"; Son dioses limitados que conforman el todo infinito Dios; Son mitad luz y mitad vida que de la luz procede
No acabo de ver a un ortodoxo (me da a mí que en el mundo católico oriental es igual) sustituyendo un lampadario de verdad por un invento de estos en los que uno echa una monedita y se enciende una bombilla. En nuestro catolicismo latino hemos sustituido a veces el culto a Dios y a los santos por el culto al dinero, aunque sea con excusas tan pintorescas como la limpieza de las paredes y el peligro de incendios.
"en mi diócesis no hay un solo templo donde sea posible encender una vela, no te lo permiten"
En España sucede lo mismo en muchísimas iglesias. A menudo se alude al peligro de incendio, pero mucho mayor era ese peligro antiguamente, cuando a menudo el suelo mismo estaba hecho de madera y no había alarmas de incendios ni extintores, y eso no impedía que se usaran las velas.
Me temo que la razón real es bastante más prosaica: las velas son molestas. Hay que reponerlas y manchan mucho. A menudo las encienden las viudas y los niños, que no dan limosnas cuantiosas.
Y, por supuesto, también molestan a toda la tribu de la religión-convertida-en-justicia-social, que suelen considerarlas despectivamente como supersticiones fruto de la ignorancia (no hay nada más ridículo que un ignorante que llama ignorantes a los demás).
Puede parecer poca cosa, pero yo creo que es una gran pérdida. Me basta considerar mis propios recuerdos para comprobar que las velas hicieron siempre que las iglesias fueran lugares especiales para mí, donde habitaba el Misterio y podía tocarse una Presencia viva. Eran parte de la belleza propia de los templos, que reflejaba la Belleza eterna de Dios, y despertaban en mí un cariño especial.
"Tampoco hay sustitutos eléctricos, como sí he visto en España"
En alguna iglesia, he visto esas luces eléctricas incluso como "velas" de altar. Los que inventaron y los que instalan en sus iglesias esas velas eléctricas tienen un lugar especial en el purgatorio reservado para ellos. Es más, me da la impresión de que cuando Stalin por fin salga del purgatorio, ellos podrán decirle adiós desde dentro.
"El domingo pasado estuve en la Divina Liturgia de la Iglesia Ortodoxa Rusa de Roma. Durante toda la celebración, bellísima, los fieles no cesaron de encender velas delante de los iconos en lampadarios puestos en el mismo centro de la nave. Los mismos fieles retiraban las velas cuando ya estaban casi totalmente consumidas"
Sí, es una de las formas de actuosa participatio que buena parte de los liturgistas no son capaces de entender. Y que clarísimamente alimenta la fe de los fieles.
"un invento de estos en los que uno echa una monedita y se enciende una bombilla. En nuestro catolicismo latino hemos sustituido a veces el culto a Dios y a los santos por el culto al dinero, aunque sea con excusas tan pintorescas como la limpieza de las paredes y el peligro de incendios"
Si somos capaces de cambiar nuestra primogenitura por un plato de lentejas, no es extraño que cambiemos las velas por máquinas tragaperras disfrazadas de lampadarios. Y luego nos quejamos de que las iglesias estén vacías.
Las velas eléctricas son un invento del demonio.
Ciertamente las velas de cera se van sustituyendo por velas eléctricas, incluso la cera líquida (muy cara por cierto) se está prodigando mucho, pero creo que no hay que yo sepa, normas o recomendaciones concretas sobre el uso de las mismas, como botón de muestra le cito el c. 940 del Código de Derecho Canónico, en el leemos que ante el sagrario en el que está reservada la santísima Eucaristía ha de lucir constantemente una lámpara especial, con la que se indique y honre la presencia de Cristo. El citado canon no da más datos sobre el tipo de lámpara. Según la buena tradición de la Iglesia, se debe tratar de una llama ardiente que simbolice la vida.
El Señor le bendiga y le guarde.
El Misal Romano establece claramente que la lámpara del santísimo debe ser de cera o de aceite: "316. Cerca del sagrario, según la costumbre tradicional, alumbre permanentemente una lámpara especial, alimentada con aceite o cera, por la cual se indique y honre la presencia de Cristo".
Muchas gracias por la aclaración, aprendo mucho con Infocatolica.
Que el Señor les bendiga.
Cuando llegue la tan ansiada Reforma, que llegará si es que antes no sucede la Parusía (Castellani dixit), habrá muchas cosas que re-acomodar.
Es asi!!!!la Gracia!!!!!Estar en estado de Gracia.
Podemos cumplir con todo!!!!!!!y encima salvarnos.
Que Dios te bendiga y bendiga en este momento a la Iglesia, he recordado en otro post, todo lo que has explicado, doctrinalmente!!!!!Hay que estudiar y ORAR!!!!En la Eucaristia!!!!!
Ciertamente, hoy en día hay costumbres que muchos - dentro y fuera de la Iglesia - tildan de "supersticiones", como bien lo has dicho. No se dan cuenta de que estas costumbres tienen un fundamento real.
Por mi parte, sólo una vez he entrado a una iglesia donde hubieran velas prendidas (aunque no recuerdo dónde fue; quizás sería el Santuario de la Divina Pastora, en Barquisimeto, Venezuela), y aunque no entendía el porqué de las velas, me pareció algo que aportaba más belleza y hacía ver mejor que ese lugar tenía algo que no pertenece a este mundo (lo mismo me pasa cuando escucho cantos gregorianos en la iglesia).
Amigos lectores, por lo que leo en sus aportes, es en general que en ningun templo te dejan encender velas. Yo la llevo a mi encuentro personal en la capilla de Adoracion en las madrugadas que estoy sola con el Señor Sacramentado. Tambien las utilizo en mis oraciones personales en el altar que tengo en mi casa. Igualmente mi padre nos dejó la devoción (cuando yo abri los ojos al mundo, ya mi padre tenia esta devoción) de mantener la lamparilla encendida a la Virgen del Carmen y a Jesus de la Misericordia, como tambien de encender el cirio pascual o una velita al momento de la oracion de cada dia en familia. Sinceramente es maravilloso como la Luz de Cristo y del Espiritu Santo nos ilumina.
Bendiciones.
"aunque no entendía el porqué de las velas, me pareció algo que aportaba más belleza y hacía ver mejor que ese lugar tenía algo que no pertenece a este mundo (lo mismo me pasa cuando escucho cantos gregorianos en la iglesia)."
Eso es justo lo que quería decir. Gracias por el comentario.
Los pasajes de la luz del mundo NO SE REFIERE a prenderle veladoras a una Imágen, ya que eso es IDOLATRIA PURA.
Yo en lo que pienso es que como no puedo estar en la iglesia por largo tiempo , el dejar la velita encendida me hace a mi recordar que alli he dejado mi oracion ante el santisimo y que aun que yo no este presente mi mente y mi corazon sigue en la presencia de Dios.
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