El mundo digital y nuestros niños
Escuela del siglo XIV. Una miniatura del manuscrito La vida de San Sergio de Radonezh, escrita por San Epifanio El Sabio
Hace unos días leía en Intramed (el primer y más importante portal de noticias para la comunidad medica en castellano), una noticia que comentaba un estudio reciente publicado en la prestigiosa revista Pediatrics, según el cuál los libros impresos fomentan una mejor interacción entre padres y niños pequeños que los libros electrónicos (https://www.intramed.net/contenidover.asp?contenidoID=94002).
Este es uno más de los múltiples estudios científicos que, de un tiempo a esta parte, no dejan de llamar nuestra atención sobre las desventajas y peligros de las pantallas frente a las bondades de la clásica lectura ––y escritura–– en papel. Dado que entiendo que se trata de un tema muy relevante y trascendente, me he tomado la libertad de traer aquí una ya vieja entrada que, sobre el asunto, publiqué en mi blog “de libros, padres e hijos”, hace más de un año (pido disculpas a los viejos seguidores de mi blog, pues probablemente la conozcan).
Y sin más demora paso a ello.