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5.06.15

Breves reflexiones (IV)

¿Cómo harás un buen examen de tu conciencia si la has formado conforme al parecer del mundo en vez de conforme al parecer de Dios?

Si no te dejas guiar por Dios, Dios dejará que te guíes por tu necedad hasta que te desplomes y entiendas que sólo en Él andarás en la verdad.

No hay noche oscura en el alma de los elegidos a la que no siga el amanecer en la gloria del Espíritu Santo.

No ama verdaderamente a Dios quien permanece impasible ante el peligro de condenación de tantas almas.

Cuanto más cerca estés del Buen Pastor, más lejos de ti estarán los lobos que buscan devorar tu alma.

A Dios no le cuesta ser santo y si te hace partícipe de su naturaleza y andas por gracia en el Espíritu Santo, la santidad nacerá en ti de forma sobrenatural.

El Señor tu Dios es jardinero de tu alma. Poda y quema tus pecados con el fuego del Espíritu Santo, riega tus raíces con la sangre de Cristo, te abona con el amor y la misericordia del Padre.

No olvides en tus oraciones pedirle a Cristo que bese la mejilla de nuestra Madre y le diga lo mucho que la quieres.

María aparte, de todos los santos que hay en el cielo, solo hay uno que tuvo a Cristo entre sus brazos. San José, regálanos esa mirada embelesada que contempla los ojos del Niño Dios.

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30.05.15

Breves reflexiones (III)

Si te propones ser buena gente por tus propias fuerzas, no lo vas a lograr. Si por gracia dejas que Dios te haga santo, serás santo. Y una vez santo, obviamente serás buena gente.

Pretender la santidad sin dedicar mucho tiempo a la oración es como pretender respirar bajo el agua sin botella de oxígeno.

Es Cristo quien te hace un favor cuando te pones en su presencia ante el Sagrario.

Si Moisés se arrodilló ante una zarza ardiendo, ¿qué haces tú de pie ante Cristo sacramentado?

Todo el oro del Arca de la Antigua Alianza no vale lo que una mirada de amor de nuestra Madre, Arca de la Nueva Alianza.

El dolor que sufres con tus cruces no es sino amor purificador de Dios que te santifica. Que tus lágrimas de dolor sean también lágrimas de gratitud.

Quien huye de la prueba y de la cruz será incapaz de huir del pecado.

Si el Señor te muestra pecados que te eran ocultos, es porque quiere liberarte de ellos por su gracia.

Si te abandonas en los brazos de Dios, te encontrarás.

Confía en la intercesión de la Madre si te quedas sin el vino del gozo de la vida en Cristo. Más eres tú que una boda en Caná.

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28.05.15

Breves reflexiones (II)

El único remedio para el corazón cristiano infartado por el pecado es la conversión por la gracia de Dios.

Si no luchas contra tus pecados, estás de antemano derrotado. Si luchas con tus propias fuerzas, jamás vencerás. Si imploras la ayuda del Espíritu Santo, estás a un paso de la victoria.

Cristo no te regaló a su Madre en la cruz para que solo la tengas en una estampita, sino para que te dejes guiar por su maternal consejo, intercesión y sabiduría.

Fíjate si te ama el Padre, que te da por Madre a la más bella de sus criaturas. Fíjate si te ama Cristo, que te da por Madre a la más bella de las madres. Fíjate si te ama el Espíritu Santo, que te da por Madre a aquella que por su poder concibió a tu Salvador.

Si piensas que la santidad es cosa de unos pocos escogidos y no va contigo, necesitas limpiar los oídos de tu alma para escuchar a Dios diciéndote: “Te concedo ser santo. Sé santo".

Toda iglesia que no solo no ayuda a sus fieles a ser santos, sino que pretende que vivan igual que los incrédulos, no es Iglesia de Cristo sino sinagoga de Satanás.

Frases tales como “Ayúdate y Dios te ayudará” y “Al que madruga, Dios le ayuda” son pruebas inequívocas de que la sabiduría popular está infectada de pelagianismo estéril.

Quien piensa que la gracia es un don que recibimos pasivamente, como si fuéramos perrillos alegres de recibir la caricia del amo, quedando tan presos de nuestros pecados como antes de recibirla, se hace compañero de condenación de Lutero.

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27.05.15

Breves reflexiones (I)

No todo va a ser escribir largos posts sobre cada tema a tratar. De vez en cuando uso las redes sociales para compartir ideas, reflexiones, impresiones, etc.

He aquí algunas:

Cuando la Iglesia se deja atrapar por el espíritu pelagiano de temas como “Imagine” de John Lenon y “We are the world", tiende a hacer el ridículo. Y no solo es que haga el ridículo. Es que cae en la más absoluta esterilidad.

Primero se forma mal al pueblo de Dios y luego se apela al sensus fidei para justificar herejías. Lo siento, no cuela.

Cuidar la creación es cosa de sentido común. Hacerle el juego al lobby ecológico-izquierdoso es otra cosa.

La Iglesia debería responder a estas preguntas: ¿Reconocería San Juan Bosco, San Ignacio, Santo Domingo, etc, sus órdenes religiosas hoy?

Por mucho que sean actividades muy respetables, si yo me dedicara a escribir el 90% de mis posts sobre fútbol y el cultivo de bonsais, no podría ser el director de InfoCatólica. De igual manera, los religiosos de clausura no pueden dedicarse a actividades que no son propias de ese carisma. Puro sentido común.

Reformar radicalmente e incluso cerrar algunas órdenes religiosas no es dejar de lado a a sus fundadores. Es rescatarlas de quienes les han traicionado y secuestrado.

A un católico de hoy le hablas de “la eficacia intrínseca de la gracia” y te mira como si le estuvieras hablando de física cuántica.

¿De verdad alguien cree que quien pisotea la moral cristiana, tiene moral para no cometer todo tipo de males? Pues va a ser que no.

Fuentes solventes aseguran que aumenta la euforia entre los protestantes iberoamericanos ante tanto elogio reciente a la teología de la liberación.

Todos, especialmente los pastores, debemos oler a oveja. Pero no a cualquier oveja. Concretamente debemos oler a cordero. Al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

¿Eres pecador como yo? Pues has de saber una cosa: Valemos tanto como la Sangre de Cristo.

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15.05.15

Monseñor Córdoba, no basta con pedir perdón

No, don Juan Vicente. A veces no basta con pedir perdón. Cuando uno ha hablado de los hombres que pasaron por las piernas de Santa María Magdalena y ha dicho que no sabe si alguno de los apóstoles era “mariconcito", no basta con pedir perdón.

Cuando uno ha dicho esto…

«Yo les digo hermanos homosexuales y lesbianas: cuando se casen tengan hogares bonitos, tengan lo que nosotros llamamos la fidelidad»

… no vale de nada decir luego que se acepta la doctrina de la Iglesia Católica. Sencillamene no es creíble.

Y si el que ha hecho eso es un obispo, de nada vale una nota pública explicando lo inexplicable. Dice Cristo que de la abundancia del corazón, habla la boca. Y su boca, Mons. Juan Vicente Córdoba, ha mostrado un corazón incompatible con la condición de pastor de la Iglesia.

Vamos a ser claros. Señor obispo, usted piensa lo que dijo, y ante el escándalo mundial que ha provocado, sale ahora a dar explicaciones. Tarde y mal. Pero en realidad, no tiene nada que explicar. Como decimos acá, “le han pillado con el carrito de los helados". 

Usted ha faltado al respeto a los apóstoles. Podría haber dicho que alguno era homosexual, que en sí mismo habría sido una declaración absurda, provocativa y escandalosa para millones de fieles católicos, pero es que además usó el término despectivo de “mariconcito". Y usted ha hablado con un lenguaje barriobajero y tabernario de Santa María Magdalena

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