(141) Lutero y la desintegración de nuestra cultura
Hace unos días se ha reeditado en Bs.As. este libro de Guillermo Gallardo (*) -historiador, crítico y periodista argentino-, cuya primera edición impresa es de Ed. Mikael, Seminario de Paraná, 1981.
Hay que agradecer, pues, a Bella Vista Ediciones el haberlo acercado nuevamente al público, incorporando en esta edición, además, como oportunos apéndices, la Bula Exsurge Domine, de condena de los errores de Martín Lutero, dada por el papa León X el 15 de junio de 1520, y la Bula Decet Romanum Pontificum de “condena y excomunión de Martín Lutero, el hereje, y sus secuaces”, del 3 de enero de 1521.
Es mérito de este libro, además de su breve extensión -de fácil lectura para ser divulgado aún entre el público no avezado en cuestiones teológicas e históricas-, el gran poder de síntesis con que su autor logra dar un pantallazo de las numerosísimas consecuencias del pensamiento y obra del Gran Hereje en la historia y cultura occidental, que era una “resultante de la infusión por la Iglesia, sobre los nuevos estados nacidos de las ruinas del Imperio Romano, de cuanto en la cultura grecolatina era compatible con la verdad revelada por Dios a los hombres. De ahí que en esa cultura se pueda señalar elementos helénicos, romanos y hebraicos, amalgamados todos ellos por la actividad vital del catolicismo, que no es una simple doctrina sino una forma de vida…” Y esta forma de vida no puede sino descansar sobre ideas y conceptos, íntimamente ligados y recíprocamente influyentes, pues quien no vive como piensa, termina pensando como vive…