InfoCatólica / Caritas in Veritate / Categoría: Santa Teresita

14.11.14

(57) La inquietud y las armas

“Revestíos de las armas de Dios,

para poder resistir las insidias del enemigo”

(San Pablo a los Efesios 6, 11)

En estos tiempos en que vemos que más de la mitad del mundo parecería haber decidido empezar a caminar con la cabeza, es difícil mantener la calma y hacer como si no pasara nada. Y sin embargo, lo difícil nunca debe amilanarnos, sabiendo que nunca nos faltará la gracia de Dios para enfrentarlo.

Por eso, para consuelo y edificación de algunos de nuestros lectores, comparto este aire suave que son las líneas siempre oportunas de San Francisco de Sales:

 *****************************************

SFcode Salesvitral“La  inquietud no es una simple tentación, sino una fuente  de la cual y por la cual vienen muchas tentaciones: diremos,  pues, algo acerca de ella.

La tristeza no es otra cosa que  el dolor del espíritu a causa del mal que se  encuentra en nosotros contra nuestra voluntad; ya sea  exterior, como pobreza, enfermedad, desprecio, ya interior,  como ignorancia, sequedad, repugnancia, tentación.  Luego, cuando el alma siente que padece algún mal, se  disgusta de tenerlo, y he aquí la tristeza, y,  enseguida desea verse libre de él y poseer los medios  para echarlo de sí. Hasta este momento tiene  razón, porque todos, naturalmente, deseamos el bien y  huimos de lo que creemos que es un mal.

 Si  el alma busca, por amor de Dios, los medios para librarse  del mal, los buscará con paciencia, dulzura, humildad  y tranquilidad, y esperará su liberación  más de la bondad y providencia de Dios que de su  industria y diligencia; si busca su liberación por  amor propio, se inquietará y acalorará en pos  de los medios, como si este bien dependiese más de  ella que de Dios. No digo que así lo piense, sino que  se afanará como si así lo pensase.

Leer más... »

1.10.13

(11) Santa Teresita, un águila guerrera

Hace unos cuantos años, un cliente de nuestra librería, agnóstico entonces, manifestó que no quería saber nada con esos “santitos dulzones” como Santa Teresa de Lisieux, y esa expresión desencadenó una áspera discusión, intentando explicarle la importancia de esta gran Santa, Doctora de la Iglesia y Patrona de las Misiones.

Luego de varios años regresó para contarnos que había viajado a Alemania, se había convertido en el santuario de Schoenstatt y …se había hecho devotísimo de Sta. Teresita, pues decía haber encontrado en ella un raro y seductor modelo de fortaleza, para hombres y mujeres de toda edad.

De ella ya había dicho Pío XI: “Se ha disminuido su espiritualidad: es un alma viril, es un gran hombre…” Es de advertir cómo en nuestro siglo, en cambio, la “perspectiva de género” es el correlato de una espiritualidad afeminada, que conduce a la subversión de psicologías y cuerpos en la masculinización de la mujer y el afeminamiento de los varones. A esta época le cuesta sin duda “digerir” la estampa del Stabat Mater, que es como una brújula: de pie, junto a la Cruz, Aurora de Esperanza.

En homenaje a Sta. Teresita, en este día de su fiesta, comparto con nuestros lectores algunas “perlas” tal vez poco difundidas, en que sin temor a un lenguaje enérgico, habla de la conquista del Cielo. Pidámosle especialmente que interceda para que en este mes recibamos grandes gracias de conversión de nuestros pobres corazones, y nos “contagie” su celo apostólico para encender las almas.

Leer más... »