Geopolítica en Oriente Medio. Carlos Paz analiza el curso que imparte en febrero en Madrid
Carlos Paz (Madrid, 1972). Escritor y analista político, autor de diversos libros de narrativa, ensayo y entrevistas, ejerce de articulista en diferentes publicaciones y portales de internet e interviene de manera habitual en varios medios nacionales e internacionales. Así mismo, ha impartido numerosas conferencias sobre diferentes cuestiones de Oriente Medio en importantes y prestigiosas instituciones y universidades.
¿Por qué ha decidido organizar un curso titulado Geopolítica en Oriente Medio?
Después de tanto tiempo enfrascado en todo lo relativo a Oriente Medio, viajando y entrevistando, dedicando el mayor tiempo a ello, resulta descorazonador comprobar que la gran mayoría de la población sigue en los mismos esquemas de siempre, contemplando esa parte del mundo como algo desconocido, “raro”, hostil, sin grandes fundamentos para hacerlo, alimentándose únicamente de tres o cuatro titulares. Este es el motivo: intentar ofrecer una visión, distinta a lo que nos han ofrecido los medios y los “expertos” desde tiempo inmemorial, una imagen lo más certera posible de qué es Oriente Medio.
¿Por qué acota el tema en las implicaciones con Europa?
Oriente Medio no es otro planeta, compartimos con varios países un mismo mar, el Mediterráneo, y en varios momentos de la historia nuestros destinos se han cruzado, y no sólo en guerra y cosas de este tipo. Con todo, más allá del mero interés histórico o cultural, Medio Oriente tiene unas implicaciones muy directas para Europa y con ello España, por ejemplo, la inmigración o determinados conflictos. En ese sentido he creído importante no abordarlo únicamente desde la lejanía que puede mover a acercarse a conocerlo, si no porque parte de los intereses de nuestra nación se juegan en esa parte del tablero internacional.
¿Cuáles son las principales claves para comprender la realidad de Oriente Medio?
De una manera recurrente y simple se explica Oriente Medio únicamente bajo dos parámetros, la religión y el factor económico, y así no es posible comprender nada. Y se hace así porque no interesa que se comprenda qué es lo que sucede y porque la formación de quienes lo explican no da para más. Existen multitud de variables que hay que tener en cuenta a la hora de explicar un país, un área: su componente étnico, el trasfondo cultural, la incidencia y la influencia de terceros, la constitución de fronteras artificiales, la lucha por la obtención de recursos básicos como el agua, el hecho de conocer los “códigos internos” que quedan sin ser explicados en Occidente porque o no conocemos determinadas categorías mentales o simplemente aquí no existen como es el caso de “las minorías” … Son muchas las claves que si se dejan al margen nos resultará imposible conocer en verdad de qué estamos hablando.
¿Por qué define a Marruecos como “el complicado vecino del sur”?
Las relaciones históricas que hemos mantenido con Marruecos nos dejan claramente de manifiesto que no es fácil convivir con él. Es un país que sólo atiende a la política “del palo y la zanahoria”. Cuando España ha sido fuerte ellos han entendido que únicamente el entendimiento y la buna vecindad era lo posible, ahora bien, en los momentos de debilidad española las relaciones se vuelven ásperas e imponen sus criterios. Ellos conocen infinitamente mejor nuestra realidad social y política que en sentido inverso y esto les hace posible actuar de este modo. Si, además, sabemos que existen políticos y medios que trabajan en su favor, podremos explicarnos muchas cosas de las que suceden en los últimos tiempos: parte del problema inmigratorio… cuestiones como la del Sahara, lo relativo al mundo del campo y de la pesca…