8 manipulaciones en torno al Sínodo
El Papa Francisco ha pedido a los participantes en el Sínodo que hablen con parresía y escuchen con humildad. Todo ello en un clima de sinodalidad y siempre “cum Petro et sub Petro”. Se trata de una oportuna y esperanzadora petición, que muchos seguirán. Pero luego llegamos los hombres, con nuestras miserias, y a menudo (por no decir siempre) no alcanzamos ese ideal al que estamos llamados. Y esto ocurre también entre los participantes en el Sínodo.
Hay una serie de estrategias de manipulación, comunes en el ámbito de la política o de la economía, que son bien conocidas y que se llevan a cabo con mayor o menor finura. No estamos tan acostumbrados a verlas, al menos a la luz del día, en el ámbito eclesiástico. Sin embargo, un observador un poco atento (no mucho, resultan muy evidentes) puede detectar en los prolegómenos e inicios del Sínodo de la Familia un despliegue amplio de este tipo de estrategias manipuladoras. Pondré algunos ejemplos: