(UNAV/InfoCatólica) El consultor propuso fomentar una cultura de corresponsabilidad que se traduzca en tomar decisiones espirituales en lugar de financieras; una participación más amplia, a largo plazo, en la vida de la parroquia; y una colaboración mayor y más generosa. Para ello, apostó por construir “un amplio sentido de pertenencia a la misión de la Iglesia” por parte de los laicos.
Según explicó, esta metodología debe basarse en la búsqueda de un compromiso más profundo de los fieles con las necesidades de la Iglesia local: “El desarrollo basado en la corresponsabilidad pide a las personas discernir la voluntad de Dios en sus vidas, lo que siempre es más difícil que simplemente prestar un apoyo financiero ocasional”. Esta actitud “requiere más tiempo, pero involucra a más gente, crea un mayor compromiso personal y obtiene mejores resultados”, puntualizó.
Compromiso de los feligreses: la vida como servicio
Por su parte, Daniel Mahan, director ejecutivo del O’Meara Ferguson Center for Catholic Stewardship en Marian University (Indianápolis, EE. UU.), indicó que la corresponsabilidad “no es el dinero que una persona entrega a su parroquia: no se promueve para asegurarse de que llegan a cubrirse las necesidades de ésta, sino para que todos los católicos hagamos de nuestra vida un servicio, empezando en la familia y ampliando progresivamente nuestro horizonte por el mundo”.
En ese sentido, dijo que numerosas parroquias de EE. UU. que han puesto en marcha esta metodología han observado que sus feligreses “son más agradecidos y constructivos, incluso en sus críticas; participan más y se comprometen en la vida de la Iglesia; y dan un testimonio cristiano en su propio ambiente”.
La jornada “Don y compromiso: claves para el sostenimiento de la Iglesia católica” abordó temas como la gestión financiera, la importancia de la transparencia, las donaciones o la comunicación de estas cuestiones. Participaron 60 expertos, entre ellos los ecónomos y personal de la Administración de más de 20 diócesis españolas.
Además de Patrick O’Meara y Daniel Mahan, intervinieron Anastasio Gómez Hidalgo, ecónomo del Arzobispado de Toledo; Marta Rey, profesora de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidade da Coruña; los profesores de la Universidad de Navarra Jorge Otaduy, Félix Mª Arocena y Diego Zalbidea; Juan Manuel Mora, vicerrector de Comunicación Institucional del campus; y Francisco Errasti, director general del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA).