(InfoCatólica) Además de Conferencias Episcopales enteras u obispos en sus diócesis, confraternidades de sacerdotes han realizado aclaraciones y peticiones sobre, como mínimo, las ambigüedades de la Declaración Fiducia Supplicans, firmada por el Papa Francisco y que está causando mucho dolor y escándalo entre los católicos a pesar del intento de redefinición de que «pareja» ya no significa «pareja».
La primera en manifestarse fue la Confraternidad del Clero Católico del Reino Unido, el 21 de diciembre, luego vinieron las de Estados Unidos y la de Australia, al día siguiente.
En España un grupo de sacerdotes, con espíritu filial, promueven una petición al Santo Padre. Entre cuyos promotores encontramos a el P. José Manuel Alonso Ampuero, sacerdote diocesano de Toledo, fidei donum en Lurin (Perú); el P. Julio Alonso Ampuero, sacerdote diocesano de Toledo, fidei donum en Lurin (Perú); el P. José María Cabrero Abascal, sacerdote diocesano de Toledo (España); y el P. Antonio Diufaín Mora, sacerdote de la diócesis de Cádiz y Ceuta (España). Al igual que está ocurriendo en muchas partes del mundo son precisamente las periferias, las iglesias martiriales y pobres, las misiones (como en este caso) los que han levantado la voz de alarma.
Como era de esperar desde medios de comunicación a los que poco les interesa la Iglesia han comenzado una persecución contra alguno de los promotores.
A través de la plataforma Change invitan a unirse a una petición para que el Santo Padre anule la Declaración:
«§ 1. Los fieles, conscientes de su propia responsabilidad, están obligados a seguir, por obediencia cristiana, todo aquello que los Pastores sagrados, en cuanto representantes de Cristo, declaran como maestros de la fe o establecen como rectores de la Iglesia.
§ 2. Los fieles tienen derecho a manifestar a los Pastores de la Iglesia sus necesidades, principalmente las espirituales, y sus deseos.
§ 3. Tienen el derecho, y a veces incluso el deber, en razón de su propio conocimiento, competencia y prestigio, de manifestar a los Pastores sagrados su opinión sobre aquello que pertenece al bien de la Iglesia y de manifestarlo a los demás fieles, salvando siempre la integridad de la fe y de las costumbres, la reverencia hacia los Pastores y habida cuenta de la utilidad común y de la dignidad de las personas.»
(Código de Derecho Canónico, 212).
Ante la Declaración «Fiducia Supplicans»
los abajo firmantes («promotores») queremos expresar lo siguiente:
1- Con Cristo, en Él y como Él, queremos amar a cada una de todas las personas.
2- Nos adherimos a la verdad revelada, recogida en la Biblia y en la Tradición e interpretada por el Magisterio secular de la Iglesia.
3- Bendecir parejas en situación irregular o en convivencia homosexual, aunque sea de forma extralitúrgica, contradice el plan de Dios.
4- En conciencia no podemos aceptar el reconocimiento de este tipo de bendiciones.
5- Pedimos filialmente al Santo Padre que anule «Fiducia supplicans»
6- Oramos por nuestra conversión y la de todos para que vivamos la caridad en la verdad.
Con un verdadero espíritu misericordioso, que como señalaba el Papa Benedicto XVI no separa la verdad de la caridad, ni la caridad de la verdad, han también compartido el testimonio de Gersón.
Unos días antes José Manuel y Julio Alonso Ampureo realizaban un análisis de la Declaración en Radio María Perú