(Aica) La Comunidad de Vida recibirá alrededor de 25 jóvenes mayores de 18 años que deseen por voluntad recuperarse de la adicción a las drogas. De esta manera, la Iglesia en Concordia ofrece una respuesta concreta frente al flagelo de las adicciones.
El objetivo, según indicaron en el obispado, es acompañar el proceso de rehabilitación de quienes tienen una dependencia de las drogas, desde una perspectiva de fe cristiana y mediante una fuerte experiencia de vida en comunidad.
El proyecto propone, además, la formación laboral y de microemprendimientos. En el predio los jóvenes construirán una huerta y criarán animales, producción que servirá para el consumo propio y también para la venta al público.
En estos momentos funcionan en la diócesis de Concordia distintos puntos de atención ambulatoria. Hay centros ce atención a adictos en San Salvador, Colón, Villa Adela, Chajarí, San Jaime, Villa del Rosario y Concordia. De allí partirán los chicos rumbo a la Comunidad de Vida para iniciar un camino de recuperación.
La Comunidad de Vida y Rehabilitación en adicciones Juan XXIII recibió para el reacondicionamiento de las instalaciones del predio la colaboración de personas, instituciones y del Estado. No obstante, los integrantes de la Pastoral de Adicciones afirman que este apostolado se sostendrá en el tiempo gracias a la providencia y a la ayuda generosa de tantos hermanos que conformarán la red de padrinos