(Sucumbiosecuador.blogspot/InfoCatólica) Durante este período, los programas sectarios que emitía la emisora dedicaban buena parte de su tiempo a calumniar a los nuevos misioneros enviados por el Papa para sustituir a los antiguos sacerdotes.
En octubre del año pasado el Papa aceptó la renuncia presentada por Mons. Gonzalo, por límite de edad, y tomó la determinación de encomendar las misiones de esa provincia del Oriente ecuatoriano a una nueva Congregación religiosa que crece rápidamente por todo el continente americano: los Heraldos del Evangelio; en Ecuador son conocidos popularmente por los Caballeros de la Virgen.
Al comunicar a Mons. Gonzalo la aceptación de su renuncia, el Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos indicaba en su carta que “el nuevo Administrador Apostólico tendrá que organizar el Vicariato e implantar de manera diferente todo el trabajo pastoral”. A partir de ese momento, Mons. Gonzalo y sus seis auxiliares carmelitas, seguidos por unos pocos sacerdotes diocesanos de marcada tendencia política, se sublevaron contra el Vaticano y el Papa.
El pasado 2 de mayo el Santo Padre Benedicto XVI llamó urgentemente al General de los Carmelitas Descalzos a una Audiencia Privada y le dio la orden de retirar inmediatamente a los carmelitas del Vicariato de Sucumbíos. No han obedecido esta orden y han regresado a Sucumbíos. La calma y la paz que se había establecido a partir de su ida a Quito se ha roto con su llegada.
El apoyo demostrado por la ciudadanía a los nuevos misioneros en la Marcha por la Paz a favor de los Heraldos del Evangelio celebrada el dia 20 de marzo por las principales avenidas de Nueva Loja ha dejado sin argumentos a los carmelitas que decían contar con la mayoría católica del Vicariato. Y ahora se dedican a gritar y provocar, pidiendo a las autoridades del gobierno Correa que les ayude en sus pretensiones.
Después de visitar Nueva Loja en abril, el propio Correa advirtió a estos rebeldes “que el gobierno respetará el nombramiento del nuevo Obispo de Sucumbíos” (Prensa Presidencial, 20 de abril).
En la tarde de ayer, aprovechándose de la devolución de la emisora a las autoridades del Vicariato, los carmelitas y sus agentes sociales han iniciado un nuevo griterío, que ya no repercute en la ciudad; solo se oyen repercusiones en las llamadas cadenas de emisoras sociales que obedecen a los líderes de la teología de la liberación y a los mandatarios revolucionários al estilo de Chavez, de Venezuela.
Mons. Rafael Ibarguren, EP ha pedido calma y que no se responda a las provocaciones que en todo momento realizan los miembros del “isamis carmelita”. En medio del griterio se llegó a oir una voz que decía: “si el presidente no los saca llamaremos a la guerrilla”. Es una voz anónima que confirma alguno de los cables de Wikileaks y de anotaciones encontradas en el ordenador del jefe guerrillero abatido en tierras del Vicariato de Mons. Gonzalo, OCD, en 2008, alias Raul Reyes.