(EP/InfoCatólica) Además, el escrito recoge peticiones de cárcel para los otros 11 imputados y colaboradores de Morín, que en total suman más de un centenar de años de cárcel, por la realización de abortos más allá de las 14 semanas de gestación, presuntamente practicados en sus dos clínicas - TBC y Ginemedex - en 2007 en Barcelona, tras finalizar la investigación del caso.
Morín, directa y personalmente o por medio de los médicos que empleaba en sus clínicas, “practicó intervenciones para la interrupción del embarazo a una pluralidad de pacientes, siendo ilegal en todos los casos”, ya que, según el auto de la juez que sigue el caso y que se conoció en febrero, no se cumplían los requisitos exigidos en la antigua ley - peligro alguno para la vida y salud de la embarazada, violación o graves taras físicas o psíquicas del feto -.
Durante el 2007, en que se produjeron los abortos ilegales, Morín explotaba las dos clínicas junto a su mujer, también imputada, y tenían como colaboradores al resto de acusados, que ejercían funciones de ginecólogos, anestesistas y psiquiatras.
Junto con Alternativa Española también han formalizado su acusación el Ministerio Fiscal, y otras acusaciones particulares como la Asociación E-Cristians, el Colegio de Médicos de Barcelona y el Centro Jurídico Tomás Moro.
La presunta trama de abortos ilegales salió a la luz en octubre de 2006 tras la emisión de un reportaje de investigación de la televisión danesa DR, que alarmaba sobre presuntas interrupciones del embarazo más allá de las siete semanas.