(Aci/InfoCatólica) El nuevo Arzobispo de Santiago, Mons. Ricardo Ezzati, explicó que una nación que dice respetar a las personas no puede atentar contra el derecho a la vida de los no nacidos, en alusión al proyecto de dos parlamentarios para legalizar el mal llamado aborto terapéutico. Mons. Ricardo Ezzati tomará posesión como nuevo Arzobispo de Santiago el 15 de enero, relevando al Cardenal Francisco Javier Errázuriz, quien dejó el cargo por haber llegado a la edad establecida para ello.
En sus declaraciones al diario Encuentro, Mons. Ezzati se refirió al proyecto de ley que el 15 de diciembre presentaron los senadores Evelyn Matthei y Fulvio Rossi para legalizar el aborto terapéutico. "¿Cómo podemos decir que una nación está respetando los derechos de las personas si no respeta el primero y el fundamental de esos derechos?", preguntó.
Mons. Ezzati dijo que nadie tiene derecho a eliminar a un ser humano porque es imagen y semejanza de Dios. También rechazó que se justifique el aborto cuando el feto tiene malformaciones. "¿Quién es el que determina que una persona se realiza simplemente porque físicamente no tienen ningún defecto? Pensemos lo que ha significado en la ideología nazi este concepto", señaló.
Afirmó que "la persona no puede ser sometida a ningún otro criterio que no sea el de la propia dignidad humana", e indicó que cuando ocurre un embarazo producto de una violación, la condena al abuso sexual no puede traducirse en el asesinato del concebido.
Reforma educativa
Mons. Ezzati también abordó la reforma educativa que impulsa el Ministro de Educación, Joaquín Lavín. Indicó que "tiene muchos aspectos positivos en lo metodológico, en dimensiones que son esenciales y necesarias para el proceso educativo, pero pierde de vista el sujeto de la educación, porque no tiene una antropología adecuada".
"Es muy justo que nos preocupemos de la estructura educativa, de que las escuelas tengan buena enseñanza, pero no basta. El educador es lo fundamental. No basta el profesor. El profesor tiene que llegar a ser maestro, maestro de vida", afirmó.
El Arzobispo recordó que la persona necesita de los conocimientos académicos y valores espirituales para realizarse plenamente y que esto es lo que brinda la educación católica, que quiere que el ser humano desarrolle todos los talentos dados por Dios.