(AnálisisDigital/InfoCatólica) Según explicó el cardenal Rouco Varela, matrimonio y familia “tienen que ver con la transmisión de la vida y de la experiencia del amor, dos realidades que marcan las personas”. Por ello, estas instituciones “pertenecen a la esencia misma del hombre” y, por lo tanto, “si no se atienden los efectos son tremendos”.
Asimismo, advirtió de que “el Gobierno debe reconocer que estas son realidades que no están en manos del poder”, a la vez que recordó que tras la II Guerra Mundial se elaboró una declaración universal de derechos del hombre, entre los que estaba incluida la familia, que “son anteriores al derecho positivo y constitucional”.
A juicio del Arzobispo de Madrid, en relación con la convocatoria para mañana domingo a la Misa de las Familias en la Plaza de Colón, “la Iglesia siempre ha salido a la calle no sólo ahora con la Misa de las Familias y en las Jornadas Mundiales de la Juventud” sino que las procesiones, los autos sacramentales, las costumbres navideñas, las costumbres de Pascua han acompañado a la historia litúrgica interna de la Iglesia siempre.
“La Iglesia es pueblo. Y, el pueblo se expresa con la totalidad de sus posibilidades. Y, lo que hacemos ahora es que salimos a la calle con un estilo y una forma como el pueblo sale a la calle”. “Es verdad que eso ocurre en contadas ocasiones, naturalmente, con razones que tienen que ver con el testimonio que queremos dar de lo que creemos y de lo que vivimos”, dijo Mons. Rouco Varela
Asuntos sin resolver en las relaciones Iglesia-Estado
Por otro lado, señaló que en el campo de la actuación del Estado, en lo referente a la justicia social, la solidaridad, lo que tiene que ver con la pobreza o con el desarrollo económico y humano de un pueblo, “las diferencias son muy grandes” y “no se ha avanzado nada”.
Además, añadió que “hay un asunto sin responder desde 1991, que es el de la formación moral y religiosa en el contexto del sistema educativo”. En este punto, dijo que “la forma en cómo se trata la clase de religión católica no se corresponde con los acuerdos entre España y Santa Sede y tampoco está muy de acuerdo con lo que exige el derecho constitucional español”.
El cardenal Rouco también afirmó que se “ha empeorado la situación jurídica de la defensa del que va a nacer” y lamentó que “cada vez más personas mayores, solas y abandonadas”.