(Miguel Vinuesa / InfoCatólica) Al comienzo de la reunión, la asamblea ha rezado la Hora Intermedia de la Liturgia de las Horas, oración a la que han seguido sendos discursos del Cardenal Arzobispo de Madrid y presidente de la CEE, Antonio Mª Rouco Varela, y del Nuncio de su Santidad en España, Monseñor Renzo Fratini.
El primero comenzaba su alocución reflexionando sobre la reciente visita del Santo Padre a Santiago de Compostela y Barcelona. Un viaje que es un “modo extraordinario de expresar nuestra unidad con el Santo Padre”. El Cardenal Rouco ha insistido en que la tarea de los obispos, transmitida por el Papa, es la de mostrar que “sólo Dios basta”. Una tarea, insistió el purpurado “de la que no se distrae”, “la misma buena noticia que se ha de anunciar sin descanso, precisamente cuando los ruidos del mundo pretenden acallarla o desnaturalizarla”.
Parafraseando las palabras de Benedicto XVI, el Arzobispo de Madrid ha afirmado que “Dios es el origen de nuestro ser y cimiento y cúspide de nuestra libertad; no su oponente”. De la Sagrada Familia, el Cardenal ha vuelto a recordar las palabras del Papa, que dijo que el templo es “signo visible de un Dios invisible, a cuya gloria se ensalzan esas torres, saetas que apuntan al absoluto de la luz, a Aquel que es la Luz, la Altura, la Belleza misma.
También ha recordado Mons. Rouco la pregunta que se le formuló al Santo Padre sobre la creación del nuevo dicasterio para la Nueva Evangelización: “He pensado en todos los grandes países de occidente, pero sobre todo también en España”. Finalmente, el Cardenal ha reiterado que, entre los retos de la Iglesia en España, se encuentra combatir el laicismo, para el que ha sintetizado tres puntos de la Instrucción “Orientaciones Morales”: formación en la fe, anunciar el Evangelio del Matrimonio y de la Familia y cuidar la Eucaristía Dominical.
El Papa espera de España que sea terreno de encuentro entre fe y laicidad
El Nuncio de Su Santidad ha rememorado también la visita del Santo Padre, agradeciendo su acogida, señalando que no se le ha despedido con un “adiós” sino con un “hasta luego”. “El Papa del diálogo entre fe y razón ha visto en España el punto central para el encuentro en fe y laicidad”.
El Papa, ha señalado su embajador, espera de España que sea terreno de encuentro, no de desencuentro entre las mismas. Llama pues a “conservar y reforzar la apertura a lo trascendente”, todo en aras de “construir una Europa que, fiel a sus imprescindibles raíces cristianas, responda plenamente a su vocación y misión en el mundo”. Es “una tarea por realizar; la tarea de no cerrar a Dios nunca el corazón. Él es el bien de todos los hombres, y de todo el hombre. La sociedad no puede prescindir de la fe, si quiere construir este mundo en la verdad, la bondad, la belleza, y el amor”, ha dicho Mons. Fratini
Por último, el Nuncio ha considerado que La Sagrada Familia es también signo de encuentro, en este caso entre “modernidad y tradición, en clave de continuidad”.