(La Nación/InfoCatólica) La parte querellante, representada por el abogado Juan Pablo Hermosilla, tiene cinco días de plazo para pedir la reapertura del caso y nuevas diligencias, situación que luego debe ser analizada por el juez. Si este último rechaza tal petición, el jurista que representa a las presuntas víctimas puede apelar a la Corte de Santiago.
El 27 de julio pasado el fiscal regional Xavier Armendáriz derivó las denuncias del gastroenterólogo James Hamilton, el periodista Juan Carlos Cruz, el filósofo José Andrés Murillo y el abogado Fernando Batlle al tribunal del crimen (justicia antigua) después de declararse incompetente para conocerlas debido a las fechas en que se habrían cometido los eventuales delitos.
Con esta resolución se desecha la posibilidad de someter al religioso a un careo con los cuatro denunciantes, ex feligreses de la parroquia de la comuna de Providencia. El miércoles 27 de octubre el sacerdote prestó declaración ante Valdivieso por 45 minutos en calidad de inculpado.
La defensa del padre Karadima detalló que esta resolución es de carácter provisional y que el querellante aún tiene recursos que podrían reabrir la investigación. Pese a esto, el abogado Cristián Muga, que representa al sacerdote, indicó a Radio ADN que el cierre de sumario “lo que hace es ratificar los presupuestos de esta defensa, en el sentido de que no se ha logrado determinar ningún hecho constitutivo de delito ni nada que pueda ser imputado al padre Fernando Karadima”.
Consultado si pedirán al juez que sobresea a su cliente, dijo que eso estaba en análisis. Mientras tanto, el sacerdote aún espera que el Vaticano decida sobre el proceso canónico abierto tras las denuncias y diligenciado primero en la diócesis de Santiago y ahora en la Curia Romana.