(SIC/InfoCatólica) La ordenación ha tenido lugar en la Catedral de Teruel al que han acudido además de un nutrido grupo de obispos, entre los que se encontraban de forma destacada Mons. Renzo Fratini, nuncio papal en España, Mons. Elías Yanes, arzobispo emérito de Zaragoza, y Mons. Manuel Ureña, metropolita de Zaragoza.
Además, el acto ha congregado a un gran número de personas que han seguido con devoción la ceremonia de ordenación episcopal, en la que se han dado cita más de 200 sacerdotes.
Terminada la homilía, el obispo electo ha prometido ante el Cardenal Rouco Varela asumir y aceptar todas las responsabilidades que contrae con el nuevo ministerio. Posteriormente, todos los obispos han impuesto sus manos en silencio sobre él. Con este gesto se expresa la comunicación de la fuerza del Espíritu Santo. A continuación le han colocado el libro de los Evangelios abierto sobre la cabeza como símbolo de que una de las tareas principales del obispo es anunciar la Palabra de Dios.
Tras la plegaria de la ordenación y la oración de fórmula sacramental ha quedado ordenado el nuevo pastor diocesano . La unción con el Crisma en la cabeza, que representa que el nuevo obispo recibe interiormente el don del Espíritu Santo; la entrega del libro de los Evangelios; la entrega del anillo, signo de fidelidad, simboliza su entrega incondicional a Cristo y a la Iglesia s esposa; la imposición de la mitra y la entrega del báculo que evoca el cayado del pastor recordando que el obispo es el pastor que ha de guiar a la comunidad cristiana. Por último el nuevo obispo ha tomado posesión de la cátedra, la silla desde la cual presidirá desde ahora la Eucaristía.
Tras la comunión, el nuncio del Papa, Monseñor Renzo Fratini, ha felicitado al nuevo obispo recordándole sus nuevas responsabilidades “sabiendo escuchar con corazón a todos tus fieles”. Este emotivo acto ha finalizado con la bendición que el nuevo obispo, acompañado de sus antecesores, ha dado a sus fieles recorriendo la Catedral de Santa María.
El nuevo obispo de Teruel ha destacado en su primera alocución al final de la misa de ordenación que se siente muy emocionado al tomar posesión de una Diócesis como la de Teruel y Albarracín, “con tanta Historia”, ya que ha dado “figuras tan importantes a la Iglesia católica”. Éste se refiere a personajes como Jaime Jimeno de Lobera, también virrey de Aragón, que fue organizador de la Diócesis de 1580 a 1594.
Asimismo, ha aseverado que va a trabajar por todos aquellos que componen la Diócesis y que va a apoyar a los laicos que cada día ejercen como cristianos, así como a las nuevas vocaciones, además de querer trabajar con los más pobres.