(LaVerdad/COPE/InfoCatólica) El grupo GEA está formado por bomberos, personal sanitario, ingenieros y otros profesionales que de manera voluntaria participan en actividades de cooperación de medioambiente, acción social y actuación de emergencias. Dentro de GEA hay un grupo específico a nivel internacional para desastres naturales como los terremotos.
Explica Juan Adrada que “aparte del estado infame de las carreteras, te encuentras con grandes dificultades por los numerosos trámites aduaneros que hay que pasar”, para pasar de la República Dominicana a Haití”. Y añade que “las carreteras no son lo peor”, puesto que “la capital está totalmente destruida y, después de seis meses, está todo por descombrar”, incluso “los edificios siguen caídos con personas sepultadas dentro y la ciudad entera está convertida en un mar de plásticos y lonas de las tiendas de campaña donde vive la gente”.
Añade que “en realidad, lo único que se ha limpiado son los alrededores del palacio presidencial, algunos edificios gubernamentales para salvar documentación y las inmediaciones de la catedral, que era el símbolo espiritual del país”, pero que “las casas están en el suelo”, y “las tiendas están derrumbadas y los comerciantes han puesto tenderetes para poder mercadear algo”.
Las ayudas que llegan son las de organizaciones que trabajan directamente con la población
Respecto al dinero recaudado para Haití, Juan Adrada explica que “las ayudas que llegan lo hacen a través de las ONG que están colaborando allí y que actúan directamente con la población”, mientras que “sobre el dinero de los gobiernos nadie se pronuncia”, y “la sensación que queda es que nadie gobierna, que la gente sólo lucha por sobrevivir”.
Por su parte, desde este grupo de cooperación y con la colaboración de las Hijas de la caridad de San Vicente de Paul se ha entregado un contenedor con 20 toneladas de ayuda humanitaria (medicinas, ropa, alimentos y material escolar). Es la ayuda más efectiva, dice Adrada, porque “aunque nuestra colaboración sea una gota en el océano, esa ayuda va a llegar a un grupo de gente que lo necesita y mucho”.
Añade que aunque no se espera mucho de los gobiernos o la ONU, sí de organizaciones de ayuda directa, que están dispuestas “a que el tema de esta nación no se olvide, porque la recuperación del país va a durar por lo menos 10 años”.