(DiariodeSevilla/InfoCatólica) El arzobispo incidió en la necesidad de que los sevillanos tengan un acercamiento más continuo a la Eucaristía a través de la misa. “¿Sería igual la vida de los matrimonios y de las familias, sería igual la vida de nuestros jóvenes si todos viviéramos intensamente cada semana la maravilla que es la Eucaristía?”, preguntó Monseñor Asenjo.
«Demasiadas veces nos hemos olvidado de Él, demasiadas horas, queridos hermanos sacerdotes, están cerrados nuestros templos, demasiadas veces quedan abandonados los sagrarios, demasiadas veces los cristianos despreciamos este alimento celestial o lo dejamos por cualquier excusa inconsistente».
La importancia de la adoración al Santísmo como amor fraterno también le sirvió al prelado para insistir en la necesidad de atender los problemas de la sociedad actual:
“Un amor que tiene que regenerar nuestra sociedad, purificarla de todos los pecados, de la violencia contra las mujeres, de todas las agresiones contra los más débiles, y de los que siendo concebidos no llegan a nacer; un amor que tiene que hacer de nosotros una comunidad abierta a las necesidades de los inmigrantes, de todos los que se sientan solos y angustiados en estos momentos de tanto dolor para los pobres, los parados y los que han dejado de percibir el subsidio de desempleo”.