(InfoCatólica) Cada vez que se presentan datos anuales de demografía en España, la primera palabra suele ser «récord» o «mínimo». Esta vez no es solo mínimo histórico desde la serie, es también la mayor diferencia negativa entre nacimientos y muertes (salvando los años de pandemia).
No es un tema con origen económico. Se podría decir que un país en el que son asesinados más de 1 de cada 5 niños concebidos y que tiene una de las legislaciones que más desprotegen el matrimonio natural se merece desaparecer o ser sutituido.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado que España alcanzó en 2024 su cifra más baja de nacimientos desde que existen registros, con 318.005 bebés, lo que supone un descenso del 0,8% respecto al año anterior. Esta cifra representa un nuevo mínimo histórico desde el comienzo de la serie estadística en 1941 y evidencia la continuidad del declive demográfico que atraviesa el país.
El saldo vegetativo marca la tercera peor cifra en ocho décadas
El balance entre nacimientos y defunciones arroja un saldo vegetativo negativo de 116.056 personas en 2024, tras registrarse 436.118 fallecimientos. Esta diferencia constituye la tercera más negativa desde que existen datos, únicamente superada por los años 2020 y 2022, marcados por la pandemia.
La tendencia descendente de la natalidad se ha acentuado en la última década: desde 2014, España ha perdido uno de cada cuatro nacimientos, lo que representa un desplome del 25,6% en apenas diez años.
Primeros indicios de recuperación en 2025
No obstante, los datos provisionales de los primeros nueve meses de 2025 ofrecen un atisbo de esperanza. Durante este periodo se han registrado 238.715 nacimientos, lo que supone un incremento de 2.243 bebés respecto al mismo periodo del año anterior. Del total de nacimientos en lo que va de año, 115.802 han sido niñas y 122.913 niños.
En septiembre de 2025 se registraron 28.597 alumbramientos, distribuidos principalmente entre madres de 30 a 34 años (9.559 nacimientos) y de 35 a 39 años (8.296 nacimientos).
El papel creciente de la inmigración en la natalidad
Uno de los aspectos más significativos del cambio demográfico español es el peso creciente de las madres extranjeras en la natalidad nacional. En 2024, el 25,6% de los nacimientos correspondió a madres con nacionalidad extranjera, el porcentaje más alto registrado hasta la fecha. Si se considera el país de nacimiento, esta cifra asciende al 33,3% del total.
Entre la población española de origen, el indicador coyuntural de fecundidad se sitúa en apenas 1,07 hijos por mujer, muy por debajo del 1,27 de las madres extranjeras y lejos del mínimo necesario para el reemplazo generacional, establecido en 2,1 hijos por mujer.
Retraso en la maternidad y envejecimiento de las madres
La edad media para ser madre se mantiene en 32,6 años, aunque presenta diferencias significativas según la nacionalidad. Las madres españolas tienen su primer hijo a los 33,2 años de media, mientras que las extranjeras lo hacen a los 30,5 años.
La maternidad tardía continúa en aumento: el 10,4% de los nacimientos en 2024 correspondieron a madres de 40 años o más, frente al 7,2% registrado hace una década. Este fenómeno ha experimentado un crecimiento del 7,3% en los últimos diez años.
Mortalidad y esperanza de vida
En el capítulo de defunciones, España registró prácticamente las mismas cifras que el año anterior, con un ligero descenso en las muertes de personas entre 85 y 89 años. Sin embargo, la tasa de mortalidad infantil aumentó hasta 3,04 defunciones por cada mil nacidos vivos.
La esperanza de vida experimentó una mejora, situándose en 84,01 años: 86,53 años para las mujeres y 81,38 para los hombres. Una persona que alcance los 65 años podría vivir, de media, 19,87 años más si es hombre y 23,64 años más si es mujer.
Matrimonios: ligero repunte con retraso en la edad
Los matrimonios experimentaron un discreto incremento del 1,7%, con 175.364 enlaces celebrados en 2024. El 4,2% de estos matrimonios correspondieron a parejas del mismo sexo, con una distribución del 51,7% entre mujeres y 48,3% entre hombres.
La edad media al matrimonio continúa aumentando, situándose en 39,9 años para los hombres y 37,2 años para las mujeres, lo que consolida el retraso en la formación familiar.
Diferencias territoriales
Por comunidades autónomas, Madrid lidera el crecimiento de nacimientos con un incremento del 3,60%, seguida de La Rioja (2,20%) y Castilla-La Mancha (2,18%). En el extremo opuesto, Baleares (-3,28%), Navarra (-2,76%) y Extremadura (-2,55%) registraron los mayores descensos.







