La Iglesia Católica lidera la ayuda humanitaria tras el paso del huracán Melissa en Jamaica

Ofreciendo alimentos, refugio y acompañamiento espiritual a las víctimas

La Iglesia Católica lidera la ayuda humanitaria tras el paso del huracán Melissa en Jamaica

El huracán Melissa, de categoría 5, devastó gran parte del Caribe dejando decenas de fallecidos y miles de damnificados. En Jamaica, donde el impacto fue mayor, distintas órdenes religiosas y organizaciones católicas han movilizado recursos para atender a los afectados.

(CNA/InfoCatólica) El huracán Melissa, de categoría 5, golpeó el Caribe el pasado 28 de octubre con vientos sostenidos de hasta 295 kilómetros por hora. A su paso dejó cerca de 50 víctimas mortales y miles de personas afectadas. Jamaica fue el país más perjudicado, aunque otras naciones vecinas también sufrieron graves consecuencias, entre ellas inundaciones y deslizamientos de tierra.

En la costa sur de Jamaica, apenas quedan edificaciones en pie. Los daños estructurales, los techos arrancados, las inundaciones, los cortes eléctricos y la interrupción de las comunicaciones han dejado a muchas familias sin hogar ni medios de subsistencia. La recuperación se prevé larga y difícil.

Diversas comunidades religiosas y entidades católicas se han movilizado tanto en la isla como a nivel internacional para atender a los damnificados y canalizar la ayuda humanitaria.

Ayuda católica sobre el terreno

Los frailes dominicos de la misión de San Martín, una iniciativa presente en Jamaica y Granada, trabajan directamente con las comunidades más afectadas. El padre Bede Mullens, OP, explicó a Catholic News Agency que su comunidad, con sede en Kingston, «se libró en gran medida del huracán», pero señaló que algunos feligreses del barrio pobre de August Town «perdieron tejados, muros y, en un caso, prácticamente toda la vivienda».

Gracias a las donaciones recibidas, la misión está adquiriendo materiales de construcción y alimentos para los damnificados. «Tras las compras masivas de los últimos días, algunos productos básicos escasean y los precios subirán, ya que la zona más afectada es un área agrícola», indicó Mullens.

Este viernes, 7 de noviembre, los frailes distribuirán 300 comidas a estudiantes de la Universidad de las Indias Occidentales, en Mona, y a feligreses con menos recursos. «Intentamos conseguir el patrocinio de benefactores locales para ofrecer alimentos y productos de higiene personal a los estudiantes más necesitados», añadió el sacerdote.

Los dominicos han logrado contactar con algunas parroquias cercanas a Montego Bay, una de las zonas más devastadas. «Una de las iglesias está funcionando como refugio, aunque solo conserva medio tejado», señaló. También organizan el envío de materiales de construcción, agua potable y alimentos infantiles a las parroquias del Sagrado Corazón, en Montego Bay, y de Santa Inés, en Chester Castle.

«Existe una necesidad inmensa de ayuda material, pero para nosotros es esencial que la misión de San Martín dé testimonio de la solidaridad universal del Cuerpo de Cristo», subrayó Mullens. «Pertenecemos a una Iglesia verdaderamente católica y verdaderamente una, a la vez global y cercana».

Franciscanos al servicio de los más necesitados

Las Franciscan Friars Charities (FFC), brazo caritativo de la Provincia de Nuestra Señora de Guadalupe, activaron el Fondo Franciscano de Ayuda para asistir a las víctimas del oeste de Jamaica.

«Los frailes de Negril se movilizaron rápidamente para evaluar las necesidades de la comunidad tras la tormenta», comunicó la organización. «Cada día comienzan con la oración y la misa antes de salir a servir a los afectados».

En Negril, los franciscanos reparten comidas calientes en la cocina de San Antonio, que actualmente atiende entre 400 y 500 personas al día. También han iniciado la limpieza de la clínica médica de Revival, que ofrece atención básica, y estudian poner en marcha una clínica móvil para atender zonas remotas.

«Comunicarnos con nuestros frailes en Negril es complicado porque no hay electricidad y las redes móviles no funcionan», explicó el hermano Jim Bok, OFM. «La destrucción es enorme. La recuperación llevará años y se necesitará un gran apoyo externo».

Apoyo internacional y coordinación con la Iglesia

La organización Hospital Sisters Mission Outreach, con sede en Illinois (Estados Unidos), colabora con Food for the Poor y otras entidades para enviar ayuda humanitaria. Tras conocerse la urgente necesidad de pañales, su equipo logístico envió 4.000 unidades y un contenedor de 12 metros cargado con suministros y equipos médicos.

Otras organizaciones católicas, como Cross Catholic Outreach (CCO) y Catholic Relief Services (CRS), han lanzado campañas para enviar alimentos, medicinas y materiales de construcción a sus socios en Jamaica, República Dominicana, Haití y Cuba.

CCO informó de que «envía suministros de emergencia a las Hermanas Franciscanas Compasivas de los Pobres y transportará por vía aérea material médico a Montego Bay cuando las condiciones lo permitan». Además, colabora con la diócesis de Mandeville en la reconstrucción del jardín de infancia de Santa Teresa, destruido por el huracán.

Por su parte, CRS explicó que «trabaja con un equipo de cien personas en Haití y con socios locales en Jamaica y en la región». La organización añadió que «la Iglesia y CRS están comprometidos a acompañar a las familias en todas las fases de la recuperación, desde la ayuda inmediata hasta la reconstrucción a largo plazo».

El Departamento de Estado de Estados Unidos, a través de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, coordinará con la Iglesia Católica la distribución de tres millones de dólares en ayuda humanitaria destinados a las zonas más afectadas del oriente de Cuba.

1 comentario

Generalife
Suele pasar
8/11/25 9:59 PM

Dejar un comentario



Los comentarios están limitados a 1.500 caracteres. Faltan caracteres.

No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.

Los comentarios aparecerán tras una validación manual previa, lo que puede demorar su aparición.