(LifeSiteNews/InfoCatólica) El presidente Donald Trump ha firmado una carta conmemorativa del quinto aniversario de la Declaración del Consenso de Ginebra, reafirmando su apoyo al derecho a la vida en el extranjero.
Bajo la primera administración Trump, Estados Unidos firmó por primera vez el documento en 2020, junto con otras 31 naciones. En él se declara «la prioridad esencial de proteger el derecho a la vida» y promover «la fortaleza de la familia y de una sociedad próspera y floreciente»; que «todo ser humano tiene el derecho inherente a la vida»; y que «en ningún caso se debe promover el aborto como método de planificación familiar» y que «cualquier medida o cambio relacionado con el aborto dentro del sistema sanitario solo puede determinarse a nivel nacional o local de acuerdo con el proceso legislativo nacional».
El 22 de octubre, la Casa Blanca publicó una carta en la que celebraba el quinto aniversario de la declaración y la labor de los signatarios en favor de los valores compartidos de la vida, la salud de la mujer y la preservación de la familia, y en la que se reincorporaba oficialmente a Estados Unidos a la declaración tras la retirada del Gobierno de Biden.
«Nunca renunciaré a proteger la santidad de toda vida humana», afirmó Trump. «Mi administración está firmemente comprometida con restaurar una cultura que valore la dignidad inherente de cada niño y con defender la verdad eterna de que cada persona ha sido creada a imagen y semejanza de Dios, con un valor infinito y un potencial ilimitado».
La coalición del Consenso de Ginebra contrasta radicalmente con el activismo a favor del aborto de muchas instituciones internacionales. Las Naciones Unidas son conocidas desde hace tiempo por impulsar una agenda a favor del aborto con el pretexto de los «derechos humanos», desde criticar a los países que prohíben el aborto hasta intentar establecer un «derecho» internacional al aborto, todo ello mientras adoptan un enfoque selectivo ante las violaciones reales de los derechos humanos por parte de países infractores como China, Arabia Saudí y Venezuela.
A las pocas semanas de volver al cargo, Trump comenzó a aplicar la Enmienda Hyde (que prohíbe que la mayoría de los fondos federales se utilicen para financiar abortos electivos)contra la financiación directa de la mayoría de los abortos en el país, restableció la Política de la Ciudad de México, que prohíbe a las organizaciones no gubernamentales utilizar el dinero de los contribuyentes para la mayoría de los abortos en el extranjero, y recortó millones en subvenciones a favor del aborto al congelar el gasto de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Pero...
No hay que olvidar, sin embargo, que la administración de Trump también ha aprobado un nuevo fármaco genérico para el aborto, ha tomado medidas para facilitar el acceso a la fecundación in vitro, que destruye embriones, y no ha impuesto restricciones a las píldoras abortivas.







