«La eutanasia contradice una ley inmemorial: no matarás»

Obispo francés hace llamamiento a los senadores

«La eutanasia contradice una ley inmemorial: no matarás»

Los ataques contra la santidad de la vida continúan por todo el mundo. En Francia, está preparándose una ley de aprobación de la eutanasia y el obispo de Chartres se dirige a los senadores para pedirles que «promuevan un plan de vida, no un plan de muerte» y trabajen por una «civilización de la vida».

(InfoCatólica) Este mes de octubre, el obispo de Chartres, Mons. Philippe Christory, ha escrito una carta pública a los senadores de su región (Eure-et-Loir). En el senado francés pronto se debatirán y votarán resoluciones sobre la ley relativa al final de la vida.

Diversos políticos llevan años promoviendo la eutanasia en Francia, mediante la aprobación de medidas tendentes a su legalización y el paso definitivo en esa dirección está a punto de darse: en mayo de este año, se introdujo un proyecto de ley para reconocer el «derecho a la muerte asistida» en el país galo.

Los requisitos para provocar la muerte del paciente serían una enfermedad grave e incurable y que la persona sufra «física o psicológicamente» por su enfermedad. Como ya sucedió con el aborto, cabe suponer que la introducción del sufrimiento psicológico es una forma de aprobar la eutanasia libre e indiscriminada de forma encubierta. Curiosamente, según el proyecto de ley, la muerte por suicidio asistido se consideraría legalmente una «muerte natural».

La única responsabilidad penal que contempla la ley sería la de las personas que impidieran a alguien practicar un suicidio asistido u obtener información sobre el mismo. De nuevo, esto resulta muy preocupante, porque esa conducta penada afectaría a los que intentasen evitar los suicidios asistidos «por cualquier medio, incluidos los medios electrónicos o en línea, en particular difundiendo o transmitiendo alegaciones o información sobre las características o consecuencias médicas de la muerte asistida que podrían resultar engañosas, con la intención de disuadir» de la opción del suicidio. Cualquier asociación proeutanasia tendría expresamente el derecho a llevar a juicio a los que intentaran disuadir a los suicidas de esa forma. Parece evidente que esta redacción del proyecto de ley intenta amordazar a los que se oponen a la eutanasia, amenazándoles con consecuencias legales.

Ante esta situación, la carta del obispo de Chartres parte del sufrimiento de las personas, que tan bien conoce la Iglesia, y de un dato: «la tasa de suicidios es muy alta en Francia». En efecto, el país galo registra casi diez mil suicidios al año, lo que lo convierte en el 19º país del mundo en número de suicidios por habitante.

¿Cuál debería ser nuestra respuesta ante los sufrimientos de las personas?, se pregunta Mons. Christory. «¿Eutanasia? ¿Suicidio asistido? No lo creo». En ese sentido, el obispo recuerda que «el sello distintivo de una civilización avanzada es promover la vida y apoyar a los que están sufriendo».

El prelado no duda en apelar a la ley natural, radicalmente contraria a la práctica de la eutanasia. «La promoción del suicidio asistido y la eutanasia contradice una ley inmemorial: no matarás». Según el obispo, la aceptación de la eutanasia es una preocupante manifestación de la tendencia general de la sociedad «hacia un mayor individualismo e indiferencia por el destino de los demás».

Asimismo, defiende el derecho a la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios. A ese respecto, recuerda que la eutanasia es contraria «al propósito mismo de su profesión, que es cuidar y apoyar a los pacientes en su plan de vida, incluso si esta se acerca a su fin físico». Por lo tanto, «la libertad de conciencia nunca debe ser suprimida ni limitada; es un derecho fundamental de toda persona»

Por todo ello, les pide a los senadores, «que promuevan un plan de vida, no un plan de muerte que manche nuestra cultura». El papel en este sentido de los políticos es fundamental, pero no es una cuestión que les competa solamente a ellos. En efecto, «debemos trabajar juntos por una civilización de la vida, donde todos tengan un lugar y encuentren el apoyo que esperan en su fragilidad».

Finalmente, el obispo se despide ofreciendo sus oraciones por los senadores, «que tanta responsabilidad tienen».

 

10 comentarios

Jose
Tristemente la Iglesia dejó de evangelizar a los hombres y dio paso casi indiferentemente a la "desevangelización" de los hombres. Y así está el mundo, que ha ido aceptando lo que le ofrecían.
Y hoy..., pues hoy la Iglesia no solo no evangeliza, sino que se une y adopta el lenguaje del mundo.
¿Se oye hablar públicamente de "Dios Padre Todopoderoso Creador del Cielo y de la tierra"? ¿Y de Cristo Rey, cuyo Reino no es de este mundo? ¿De lo que significa para el hombre desobedecer los mandamientos de Dios? ¿De la intercesión de la Santísima Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra?
No... Solo se les habla a un grupo de hombres reunidos en un Senado "democrático liberal" que solo responde a intereses, al Poderoso Caballero Don Dinero, a cualquiera que le consiga algún otro beneficio terrenal, y al cual no le importa nada obedecer a Dios.
20/10/25 8:04 PM
Francisco Javier
Pedirle a mayorias descatolizadas que respeten la vida de enfermos, ancianos y no nacidos (mientras defienden la de criminales, pandilleros, genocidas y terroristas) es pedirle a la higuera estéril que de fruto.
Reevangelizar es lo que toca, comenzando con recatolizar a la Iglesia.
20/10/25 8:20 PM
Edgar O Mora

Ésta cultura de la muerte sigue avanzando en los países Occidentales, seguro que no aplican para las culturas extranjeras que ya se encuentran en el país y que tienen altas tasas de fecundidad y se rigen por otras leyes.

El verdadero enemigo de nuestra fe, duerme con nosotros. Una vez que estos países de la UE se conviertan en musulmanes, será muy fácil para quienes crearon esta "religión" decirles hermanos de Abrahan ya sabemos quién es el mesías esperado. Será por eso que la paz recién lograda se llama la “paz abrahánica”.
20/10/25 11:06 PM
DUMAS
A travers cette loi liberticid sur l'euthansie,nous voyons bien que l'apostasie et à son comble et que nous sommes proches de lafin des temps; bientôt, la France sera durement châtiépour es nombreux crimes, notamment celui de l'avortement
21/10/25 9:17 AM
Antonio
Llevamos muchos años arrastrando un error de traducción bastante descarado, el mandamiento en hebreo y griego se traduce textualmente como " no asesinaras " es evidentemente muy diferente , se permite matar rn defensa propia, en defensa del honor, en la guerra, en las condenas a muerte dictadaspor un juez etc , de lo contrario todas las escrituras serían una maraña de contradicción, porque constantemente se habla de condenas a muerte hasta por motivos que hoy son nimiedades, hasta cuando seguirán con ese error descarado de traducción?
21/10/25 9:25 AM
Roberto
Efectivamente, la cultura del descarte, contraria a la ecología integral católica, se cierne sobre el débil, sobre el que no es productivo: el nasciturus, la mujer prostituida, el migrante, la víctima del cambio climático, el reo condenado a muerte, el anciano olvidado por la familia, el enfermo demasiado caro para el sistema.

Porque detrás de todo aquel que ha pedido la eutanasia, está la sociedad que le he dejado de lado; su familia que no va a verlo, etc.

Y eso sin hablar de los miembros del colectivo elegetebé transgénero, que sienten una ansiedad terrible ante cómo los ha creado Dios: varón o mujer. Hasta tal punto de rechazar lo que son para convertirse en aquello que les gustaría ser. Pero como ven que no es posible, entonces llega la doble decepción.
21/10/25 10:28 AM
Marta de Jesús
De la (cuasi)obligatoriedad social actual de creerse de letritas, sin serlo, para así justificar(quienes practican) /o imponer (a quienes todavía no practican) un modelo sexual, a la obligatoriedad de creerse indigno de seguir viviendo, estando a merced de personas que puedan vernos como una carga o peor, solo hay un paso. Van tema a tema colando su neopaganismo de autoadoración. En el blog del señor Néstor la semana pasada hacía énfasis en médicos individuales que no serán de fiar. A mí me preocupa más el estado en conjunto, a partir de donde se moldea el sistema médico, y no solo el público, pues afecta tarde o temprano a todos. Los médicos "malos" de la época del nazismo y otros funcionarios, no hubieran sido (tan)peligrosos sin un sistema nazi que les elegía, manejaba y dirigía la nación en una clara dirección. Dichos médicos ("malos") solo se pueden colar en sistemas menos perversos, con mucho cuidado de no ser detectados. En sistemas tétricos directamente son elegidos, ascendidos, premiados..., incluso fabricados (moldeados hacia el mal). No debemos nunca participar de ello, incluso aunque nos cueste nuestra propia vida. No temer a quien mata el cuerpo...

Nuestra vida siempre estará en Manos de Dios, aunque antes tengamos que pasar por peligros como éste. Dios nos asista llegado el caso.
21/10/25 10:53 AM
Marta de Jesús
Quienes critican a la Iglesia, como si no fuéramos todos nosotros parte de ella, recuerden que nunca se prohibió la Evangelización, ni la de fuera ni la más cercana, hasta la familiar. Pero el escenario social cambió drásticamente. De la imponente cristiandad a un cristianismo cada vez más residual. De tener ejércitos a tener que sacudir las sandalias. Otra cosa es el hecho de la falta de correcciones o debilidad en ellas. Y todas estas tormentas ideológicas que nos han afectado, pero también a nuestras vidas, no pueden negarlo. Si desde lo alto hubiera podido hacerse mejor, desde las familias también. Mis padres hubieran podido transmitirme la Fe, nadie se lo impidió. Pero apenas lo hicieron. A mí me maravilla el resto fiel frente a esta desolación. Todo forma parte del Plan de Dios, quien Reina misteriosamente. Los Apóstoles no entendieron en principio la condena y muerte de Jesús. Como quizá nosotros tampoco entendemos por lo que estamos pasando como Iglesia. Santo Abandono. Confiar totalmente en la Trinidad. Cada uno desde nuestra parcela, donde Dios nos haya plantado, dejarle hacer a Él.
21/10/25 11:00 AM
Amapola Castellano
Roberto, de verdad puede igualar al nasciturus que dice usted, acertadisimamente por lo demás, con las víctimas del cambio climático??? Es usted un bergogliano artero y hasta lucifer inocente, juntando el bien y la verdad con la mentira y el mal para que estás últimas opaquen a las primeras. Bueno, al estilo Munilla que junta migrantes con bebés...quedando bien con unos y con otros...
21/10/25 12:25 PM
Ms
Cosa de tener ya unos años.... recuerdo cómo la Iglesia, desde San Juan Pablo II y Benedicto XVI arreció la defensa del derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural, en la ONU, en las conferencias episcopales, en Roma, donde hiciera falta, no era una trinchera, era LA TRINCHERA. Ambos papas entendieron que era una lucha fundamental, en la que estarían solos contra el mundo... y nada debió hacer más felices a los amos del mundo que la Iglesia cambiara este discurso, para algunos cansino, por el cuidado de la Creación... quizás no fuimos conscientes, o sí, pero de algún modo igualamos a las focas, con las personas, es más las focas tienen más valor que las personas... Esa trinchera fue abandonada porque mola más presentarse por el mundo alineados con la agenda 2030. Nos empezó a preocupar más las crías de las águilas que los fetos. Empezamos a hacer un paquete en que metemos la vida del no nacido, mezclado con migrantes a los que, al parecer, hay que mantener sí o sí, o asesinos con sentencia de pena muerte (por cierto no estoy a favor de lo último solo reproduzco el combo que se hace, que parece ser es indisoluble). En fin. Pues abandonados los fetos a su suerte los siguientes somos los vivos que estorbamos. En la eutanasia los poderosos tienen su herramienta. El problema es que ya no hay trinchera común en la Iglesia, hay francotiradores como este obispo, pero eso es muy poco efectivo, y poco emocionante. Mejor seguimos con agenda 2030 que nos hace más popula
21/10/25 1:19 PM

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