(G24.gal/InfoCatólica) Trece personas —diez nadadores y tres miembros de apoyo— forman la expedición que está realizando el Camino de Santiago por mar. La mayoría de los participantes reside en Sevilla y pertenece al Club Natación Sevilla. Este grupo se encuentra en Galicia para completar la ruta jacobea nadando a través de la ría de Arousa. Este sábado culminaron la primera etapa, entre O Grove y Cambados, con un recorrido superior a los cuatro kilómetros.
«Lo que vamos a hacer es nadar desde O Grove toda la ría de Arousa, pasando por A Toxa y por Cambados, remontar el río Ulla y llegar a Pontecesures. Son unos 35 kilómetros a nado. Después, desde Padrón, caminaremos la última etapa hasta Santiago para visitar la catedral», explica Ignacio Pérez Domínguez, uno de los integrantes de la expedición.
Según los organizadores, cada kilómetro recorrido en el agua equivale aproximadamente a cuatro caminando, por lo que superarán los cien kilómetros requeridos para obtener la Compostela, el certificado que acredita la peregrinación.
«Llevamos preparando esto un año y medio. Es verdad que todos somos nadadores de aguas abiertas, por lo que estamos acostumbrados a pasar mucho tiempo en el agua. Durante este tiempo hemos entrenado entre cuatro y cinco días a la semana en piscina y casi todos los fines de semana hemos salido a nadar al mar», señala Atenea Campos Llamas, una de las nadadoras del grupo.
Una travesía con propósito solidario
Más allá del desafío deportivo, la expedición busca un objetivo solidario: recaudar fondos para la Asociación Andaluza Mar Pozo, Por la sonrisa de un niño. Los donativos se destinarán a mejorar las salas de radioterapia y quimioterapia del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, con el fin de que los niños con cáncer o enfermedades poco frecuentes reciban sus tratamientos en un entorno más acogedor.
«Lo que se pretende es acondicionar las salas con paneles lúdicos interactivos para que estos pequeños estén distraídos mientras reciben los tratamientos y poder sacarles una sonrisa», explica Carlos Alberto Pazos Amoedo, otro de los deportistas.
Kilómetros solidarios por una buena causa
Las personas que deseen colaborar con la iniciativa pueden hacerlo a través de las redes sociales Facebook e Instagram, en la página Nadando a Santiago 2025, donde se encuentra disponible el número de cuenta para realizar donativos y convertir los kilómetros nadados en kilómetros solidarios.
«Son dos euros por kilómetro, y cada persona puede aportar la cantidad que desee: cinco kilómetros, uno, o lo que considere», aclara el nadador José María Bonal Muñiz.
El grupo se propuso alcanzar 1.200 euros —dos euros por cada uno de los 600 kilómetros que sumarán entre todos—, pero ya han duplicado esa cifra. El proceso de donaciones continuará abierto hasta el final de la travesía, previsto para el próximo fin de semana.







