(InfoCatólica) La reciente publicación de la guía pastoral «Segen gibt der Liebe Kraft. Segnungen für Paare, die sich lieben» («La bendición da fuerza al amor. Bendiciones para parejas que se aman»), ha provocado un nuevo desencuentro entre la Conferencia Episcopal Alemana (DBK) y el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, a pesar de que ambas partes afirman haber mantenido comunicación previa al respecto.
El documento, que ofrece orientaciones para bendecir a parejas no casadas sacramentalmente en diversas situaciones, incluidas las de igual sexo, fue aprobado por la llamada «Conferencia Común», compuesta por diez obispos y diez representantes del Comité Central de los Católicos Alemanes (ZdK). Según el comunicado publicado el 23 de abril de 2025, el texto se dirige a los obispos diocesanos como una recomendación pastoral, y su aplicación queda a criterio de cada ordinario.
Sin embargo, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el cardenal Víctor Manuel Fernández, había manifestado previamente por escrito su desacuerdo con aspectos del borrador original. En una carta enviada el 18 de noviembre de 2024 al obispo Stephan Ackermann, coordinador de la elaboración de la guía, el purpurado expresó dos objeciones principales: por un lado, que el texto parecía legitimar las uniones no matrimoniales; por otro, que proponía una estructura ritual incompatible con las indicaciones de «Fiducia supplicans», documento aprobado a finales de 2023 bajo el pontificado de Francisco.
A pesar de que, según fuentes del entorno del Dicasterio citadas por Communio, no hubo en ningún momento una aprobación explícita por parte de Roma, los obispos alemanes han mantenido que el texto fue elaborado «en consulta» con la instancia vaticana. El presidente de la DBK, monseñor Georg Bätzing, afirmó en la apertura de la Asamblea Plenaria celebrada en Fulda en septiembre que se trabajó en coordinación con el Dicasterio, y que la guía representa una aplicación pastoral adaptada al contexto alemán de lo expuesto en «Fiducia supplicans».
En respuesta a las observaciones del cardenal Fernández, se introdujeron ciertas modificaciones en el texto final. En concreto, se sustituyó la expresión «regulación oficial» por «guía general», y se eliminó un esquema de celebración que incluía elementos como la bienvenida a la pareja, lecturas bíblicas y oraciones. No obstante, el documento mantiene referencias a «aclamación, oración y canto», así como a un «rito de bendición» con elementos de alabanza, acción de gracias e intercesión.
Desde la publicación de la guía, varias diócesis alemanas han comenzado a difundirla y a implementarla. La Conferencia Episcopal Alemana, por su parte, ha evitado responder públicamente si considera que cuenta con el respaldo del Vaticano para su publicación en la forma definitiva.
El Papa en contra de la guía
El papa León XIV, en una entrevista concedida poco antes de la asamblea de Fulda, se refirió de manera crítica a la publicación en Europa del norte de «rituales para bendecir a personas que se aman», señalando que estos contravenían directamente el espíritu de «Fiducia supplicans», que permite bendiciones espontáneas y breves, pero no ritualizadas ni equiparables a celebraciones litúrgicas.
En Alemania, el proceso de elaboración de la guía se remonta a una resolución del Camino Sinodal del 10 de marzo de 2023. La propuesta fue encomendada a una de las seis comisiones de trabajo establecidas por la Conferencia Común, y fue presentada oficialmente al prefecto Fernández en octubre de 2024, mediante una carta en la que se especificaba que no se buscaba su aprobación formal, sino mantenerlo informado del desarrollo pastoral en Alemania.
Finalmente, el 4 de abril de 2025, la Conferencia Común aprobó el texto por mayoría, y recomendó su difusión y uso. El Consejo Permanente de la DBK había tomado conocimiento del documento en enero y animado a sus representantes a respaldarlo en dicho foro, sin llegar a emitir un acuerdo propio.
Desde Roma, fuentes citadas por Communio subrayan que el Dicasterio no ha otorgado su conformidad a ninguna versión del documento y que, en cualquier caso, futuras estructuras pastorales nacionales deberán contar con la correspondiente recognitio del Santo Padre. Mientras tanto, se mantiene el diálogo entre ambas partes.







