(ACIPrensa/InfoCatólica) El Monasterio de la Virgen María, situado en Assiut, al sur de Egipto, goza de una relevancia singular. Es considerado la última etapa del recorrido de la Sagrada Familia en tierras egipcias y conserva una antigua cueva donde, según la tradición, Jesús, María y José habrían permanecido antes de regresar a Tierra Santa. La vida monástica en esta región del Alto Egipto floreció a partir del siglo IV con san Juan de Egipto —también conocido como san Juan de Assiut en Oriente Medio y el norte de África— y el monasterio continúa hoy su labor pastoral con celebraciones diarias de la Misa, bautismos y la acogida de peregrinos.
Cada año, este centro religioso se convierte también en escenario de una de las principales celebraciones cristianas de Egipto. Del 7 al 22 de agosto, con motivo de la festividad de la Virgen María, tiene lugar la conmemoración de la visita de la Sagrada Familia a Assiut.
La cita reúne a una multitud de peregrinos, en especial el día de la solemnidad mariana, cuando la asistencia supera las 750.000 personas, según informó ACI MENA, agencia árabe de EWTN News. El complejo monástico cuenta con varias iglesias, aunque la llamada Iglesia de la Cueva es objeto de especial veneración.
La tradición sostiene que José utilizó originalmente la cueva como almacén de grano y que más tarde la Sagrada Familia habitó en ella. En siglos posteriores, el lugar fue refugio para cristianos perseguidos en Egipto, quienes transformaron estas grutas en templos. Aunque en las iglesias coptas ortodoxas lo habitual es la veneración mediante iconos, sin presencia de estatuas, en 2023 el monasterio de Assiut acogió la colocación de la mayor estatua de la Virgen existente en el país. Se trata de una figura de bronce inspirada en la célebre imagen de Nuestra Señora del Líbano, instalada con ocasión de la celebración de su nacimiento.
A esta conmemoración se sumó también la emisión, por parte de la Casa de la Moneda de Egipto, de una colección de 12 monedas en honor a los principales lugares vinculados al recorrido de la Sagrada Familia, entre ellos el santuario de Assiut, conocido con el nombre de Durunka.







