(CV/InfoCatólica) En un reciente comentario la revista American Reformer insta a los líderes protestantes a responder con más contundencia a la apologética católica, con la teología eucarística en el centro de lo que el autor considera una creciente ola de conversiones de alto perfil a la Iglesia católica. Muestra preocupación porque los católicos compartan su fe y en un mundo en el que incluso términos como apologética o 'proselitismo' está mal visto entre algunos católicos, ese amor a la verdad está llevando a muchos evangélicos y anglicanos al catolicismo.
Anglican Ink recoge un artículo de Mike Sabo (Associate Editor of American Reformer) basado en Daniel Waterland, archidiácono anglicano y rector del Magdalene College de Cambridge. El artículo señala, algo molesto, la creciente influencia del pensamiento católico en el discurso público. Citó a conversos como el youtuber Cameron Bertuzzi, el autor Casey Chalk y el vicepresidente JD Vance como ejemplos emblemáticos de un cambio más amplio que ha despertado tanto fascinación como preocupación entre los observadores protestantes.
«En las últimas décadas, los protestantes han cedido gran parte del espacio público a los católicos», escribió Sabo.
Según relata Catholic Vote, señaló a destacadas voces católicas conservadoras como Jack Posobiec, Matt Walsh y Michael Knowles, que «no tienen ningún problema en hacer proselitismo abiertamente por su confesión», mientras que muchos comentaristas protestantes permanecen relativamente en silencio.
Aunque reconocía el fervor de los evangelizadores católicos, cuestionaba si representaban fielmente la tradición protestante.
«Esta multitud parece no tener casi ninguna familiaridad con las confesiones, los catecismos o las enseñanzas del protestantismo ortodoxo clásico», escribió. «No muestran ninguna evidencia de haber leído ni un solo libro de alguno de sus muchos teólogos dotados. Solo se discuten los temas más superficiales, y aun así de la manera más engañosa».
Su crítica más dura se centró en la Eucaristía, que a menudo es un punto central en las historias de conversión.
«La idea de que el golpe mortal contra el protestantismo es que Roma tiene el sacrificio de la misa, mientras que los protestantes solo tienen símbolos vacíos, es ridícula», escribió. «Aunque eso puede ser cierto para muchas iglesias no confesionales, e incluso para iglesias de confesiones que en su día tuvieron una teología eucarística más rica, no es el caso de muchas otras iglesias protestantes, y especialmente del protestantismo histórico».
En su artículo, no profundizó en cómo la teología protestante entiende la Eucaristía más allá de la representación simbólica. Y algunos analistas mencionan que tiene razón para preocuparse. Frente a una doctrina verdadera, cualquier sucedáneo no es atractivo.
El anglicano también expresó su frustración por lo que considera una dinámica unilateral en el diálogo religioso: «Los católicos se indignan con frecuencia cuando los protestantes intentan convertirlos o hablan como si no formaran parte de la única iglesia verdadera, católica, santa y apostólica», afirmó. «Pero estos apologistas pro-católicos no tienen ningún problema con el proselitismo evangélico».
Añadió que muchos ven el evangelismo «como un campo listo para la cosecha».
Así mismo pidió un compromiso renovado por parte de los líderes e intelectuales protestantes, especialmente para contrarrestar lo que él considera conceptos erróneos sobre sus doctrinas, como la suposición de que los protestantes carecen de una estructura de autoridad eclesiástica legítima o la simplificación excesiva de sus objeciones al poder papal.
«Las apologéticas pro-Roma en Internet se han llenado de citas fuera de contexto o versiones simplificadas y bidimensionales» de los debates teológicos, afirmó, incluidos los relativos al «poder del papa sobre el ámbito civil y la eucaristía».







