(Daniel Payne/CNA) El P. Carlos Martins, popular sacerdote y podcaster, es absuelto de cargos penales después de que un incidente en una parroquia de Illinois el año pasado derivara en acusaciones menores.
El Burke Law Group informó en un comunicado de prensa este miércoles que el sacerdote, director del podcast «The Exorcist Files», había sido «totalmente absuelto de todos los cargos» derivados de un evento ocurrido el 21 de noviembre de 2024 en la parroquia Queen of Apostles en Joliet, Illinois.
La abogada Marcella Burke dijo en noviembre a CNA que el incidente en cuestión ocurrió cuando Martins tocó el cabello de una niña mientras hacía una broma sobre su propia calvicie. La broma ocurrió públicamente «en un entorno de aula con maestros, clero, personal parroquial y voluntarios presentes».
Según informa CNA, el incidente llevó a que los fiscales del condado de Will presentaran una denuncia penal contra Martins en enero, en la que se alegaba que Martins incluso llegó a poner el cabello de la niña en su boca.
El miércoles, el Burke Law Group informó que los fiscales «retiraron esos cargos y desestimaron el caso» sin que se encontrara ninguna conducta indebida ni responsabilidad penal por parte del sacerdote.
Burke dijo el miércoles a CNA que el cargo conllevaba una pena máxima de 365 días de cárcel y una multa de 2.500 dólares.
En el comunicado de prensa, la abogada señaló que la desestimación de los cargos era «exactamente el resultado que esperábamos».
«De lo que se le acusaba era simplemente absurdo», dijo Burke. «Este fue un caso que nunca debió haberse presentado. El fallo del tribunal es una plena reivindicación de la inocencia del P. Martins desde el principio de cualquier conducta delictiva».
Por su parte, Martins expresó en el comunicado que estaba «profundamente agradecido con todos los que ofrecieron sus oraciones y apoyo durante este tiempo».
«Estoy agradecido de que la verdad haya salido a la luz y espero reanudar mi ministerio y continuar predicando el Evangelio», dijo el sacerdote.
Martins es sacerdote de la orden Companions of the Cross. Hasta la tarde del miércoles, la orden no había emitido una declaración sobre el caso.