(Kath.net/InfoCatólica) El sacerdote, párroco de Cristo Redentor en Múnich, ha anunciado que retendrá la parte del «Pfarrcent» destinada al BDKJ (Federación de la Juventud Católica Alemana), después de que esta organización participara en una contramanifestación contra la marcha provida «Marsch für das Leben». Así lo comunicó en una carta enviada el 22 de junio al cardenal Reinhard Marx, arzobispo de Múnich y Freising, según recoge el medio Corrigenda.
El «Pfarrcent» es una contribución anual que se solicita a las parroquias para el trabajo juvenil: cinco céntimos de euro por feligrés, de los cuales la mitad se destina al decanato y la otra mitad al BDKJ. Windolf anunció que solo transferirá la parte correspondiente al decanato, reteniendo la del BDKJ debido a su conducta, que calificó de incompatible con la misión eclesial.
Según Corrigenda, el BDKJ de Múnich-Freising participó en la contramanifestación del pasado 13 de abril junto con colectivos como «Pro Choice Múnich» y «Antifa Múnich», ambos caracterizados por su caracter abortista y su hostilidad hacia la Iglesia. La Antifa, según el párroco, no solo muestra actitudes violentas, sino que califica a la Iglesia de «organización fascista» y se presenta abiertamente como antisistema y antieclesial.
«Aquí se difama de forma vil a personas que sostienen una opinión impopular. Desde mi punto de vista, es una campaña profundamente anticristiana señalar como extremistas de derechas y nazis a familias jóvenes, embarazadas, obispos, sacerdotes, religiosos y fieles de distintas confesiones», expresó el sacerdote en su carta. Recordó además que los organizadores del «Marsch für das Leben» se definen como aconfesionales e independientes.
En declaraciones al medio Corrigenda, Windolf explicó que la defensa de la vida es una tarea esencial de la Iglesia, que él mismo considera prioritaria. Subrayó la necesidad de oponerse al clima hostil actual con claridad y determinación:
«No tengo palabras ante el hecho de que incluso dentro de la Iglesia se difame a los defensores de la vida. Eso va contra mi sentido de la justicia».
Windolf solicitó que el arzobispado mantenga un diálogo con los responsables del BDKJ y les exija una retractación pública. Consultada por Corrigenda, la archidiócesis de Múnich y Freising declinó hacer más comentarios, limitándose a señalar que ya se ha producido una conversación entre representantes del arzobispado y del BDKJ.