(ACIAfrica/InfoCatólica) La Coordinadora Nacional de la Renovación Carismática Católica en Angola, Benvinda Canene, ha subrayado la importancia de que los miembros del movimiento conserven su identidad católica y no adopten prácticas propias del pentecostalismo, que podrían distorsionar su esencia.
En declaraciones a ACI África el pasado 17 de marzo, tras la celebración del Congreso Nacional del 2 al 7 de marzo en la Diócesis de Namibe, Canene afirmó: «Debemos vivir como carismáticos dentro de la Iglesia Católica, no como pentecostales».
La dirigente aclaró que la Renovación Carismática Católica es un don del Espíritu Santo dentro de la Iglesia y no una estructura paralela ni una comunidad independiente. «No es una nueva Iglesia ni un movimiento aparte, sino una forma de vivir la fe en mayor comunión con las enseñanzas y los sacramentos», explicó.
Canene advirtió que algunos miembros, provenientes de otras denominaciones cristianas, introducen en la Renovación prácticas pentecostales que pueden generar confusión y desviar al movimiento de su verdadera identidad. «Debemos ajustarnos, unirnos con un solo corazón y una sola alma. La Renovación Carismática Católica debe permanecer fiel a la Iglesia y a sus tradiciones, sin ceder a la tentación de adoptar características de otros grupos cristianos», insistió.
El congreso nacional de marzo se llevó a cabo bajo el lema «Como pan ázimo, purifiquémonos de la vieja levadura». Reflexionando sobre esta temática, Canene destacó que el pan ázimo simboliza la necesidad de eliminar las prácticas y actitudes negativas que pueden contaminar la vida espiritual de los miembros. «El objetivo fue que los participantes se purificaran y renovaran, convirtiéndose en ‘masa nueva’, más alineada con la santidad y la pureza cristianas», explicó.
Retos y desafíos del movimiento
Durante el encuentro, se abordaron varios desafíos que enfrenta la Renovación Carismática en Angola. La falta de unidad dentro del grupo fue señalada como un obstáculo para su crecimiento y para la acción del Espíritu Santo. «Las divisiones internas debilitan el movimiento y dificultan su efectividad», afirmó Canene.
Otro de los problemas identificados fue el desconocimiento del Catecismo de la Iglesia Católica por parte de algunos miembros, lo que puede llevarlos a adoptar ideas erróneas o incluso a acercarse a sectas. «Para evitar este riesgo, es esencial que todos los miembros conozcan y vivan profundamente la doctrina de la Iglesia», subrayó.
Asimismo, destacó la necesidad de obediencia a la autoridad eclesial, pues la falta de seguimiento de las enseñanzas de la Iglesia puede afectar la armonía y el crecimiento espiritual del movimiento.
Ante este panorama, Canene hizo un llamamiento a la constante purificación espiritual de los carismáticos, evitando prácticas que puedan dañar la identidad del movimiento. «Debemos renovarnos, abandonar lo que no está en sintonía con la verdadera fe católica para convertirnos en nuevas criaturas en Cristo», exhortó.
Llamado a la unidad y fidelidad a la Iglesia
La líder de la Renovación Carismática enfatizó la importancia de la fraternidad y la comunión entre los miembros. «El Espíritu Santo habita solo donde hay unidad, y a través de esta unión podemos avanzar juntos como un solo cuerpo», señaló.
Por último, insistió en la necesidad de mantenerse firmes en la Sagrada Escritura y en las enseñanzas de la Iglesia. «Conocer y vivir el Catecismo es crucial para no ser engañados por ideas incorrectas y para garantizar que la Renovación Carismática Católica permanezca fiel a la Iglesia sin ser confundida con otros movimientos», concluyó.