(NCRegister/InfoCatólica) Según las estadísticas de la archidiócesis, alrededor del 83% de los católicos bautizados no participan en la vida de la Iglesia. Consciente de esta realidad, el arzobispo Pérez ha expresado su deseo de reducir esa distancia y llevar a esas personas de vuelta a la fe. «Queremos plantar la semilla, acercarnos a esa comunidad y traerla de nuevo al altar, de vuelta a casa, a la Iglesia», explicó el prelado en una entrevista con EWTN News Nightly.
Los «centros misioneros» estarán integrados en parroquias y contarán con equipos de tiempo completo, formados por coordinadores de servicio, expertos en comunicación, especialistas en eventos y misioneros. Todos ellos trabajarán bajo la dirección del párroco y tendrán como misión principal facilitar el encuentro de las personas con Cristo y su Iglesia.
No vine para cerrar parroquias
En una carta pastoral publicada en enero, el arzobispo subrayó que esta estrategia es una respuesta a la crisis de cierres parroquiales. «No vine aquí para cerrar parroquias; vine para construir la Iglesia de Filadelfia», afirmó. Además, destacó que el modelo de evangelización adoptado sigue la exhortación apostólica Evangelii Gaudium, en la que el papa Francisco llama a la Iglesia a ser una comunidad de discípulos misioneros que busquen activamente a quienes se han alejado.
Durante la entrevista, Pérez también recordó a santa Katharine Drexel, cuya festividad se celebró el lunes. Esta santa de Filadelfia, heredera de una gran fortuna, dedicó su vida a la evangelización de comunidades marginadas. «Ella se hizo la misma pregunta que nos hacemos hoy: “¿Dónde necesita estar la Iglesia y cómo?”», reflexionó el arzobispo.