(KNA/InfoCatólica) Según el terapeuta de parejas Rudolf Sanders, la Navidad es un periodo especialmente propenso a los conflictos en pareja debido a las altas expectativas emocionales. «La Navidad activa en muchos una profunda necesidad de pertenencia familiar», comenta Sanders. Sin embargo, esta época también puede reavivar heridas del pasado.
Un ejemplo recurrente que observa en su práctica es el de personas que buscan recrear una «familia ideal», muchas veces idealizada, lo que puede generar frustraciones cuando la realidad no se ajusta a las expectativas. «He trabajado con parejas donde la historia personal de uno de los miembros afecta directamente la dinámica navideña. Es crucial identificar estas raíces emocionales para evitar conflictos recurrentes», añade.
¿Cómo evitar tensiones durante las fiestas?
Sanders sugiere a las parejas reflexionar sobre sus expectativas antes de las fiestas: «Pregúntense qué desean realmente de la Navidad y confíen en que su pareja está haciendo lo mejor posible». También destaca la importancia de mantener una visión positiva hacia el otro: «Asumir que el otro no actúa con mala intención es fundamental para fortalecer la relación».
En lugar de centrar la atención en «producir» una celebración perfecta, Sanders recomienda enfocarse en disfrutar del tiempo juntos y reducir el estrés asociado a las expectativas externas.
La espiritualidad como recurso en las relaciones
La fe juega un papel central en la terapia de Sanders, quien reconoce que su propia espiritualidad influye en su trabajo. «El concepto de la resurrección me inspira profundamente, incluso en contextos de pareja. Creo firmemente que, con esfuerzo y fe, los vínculos rotos pueden ser restaurados», asegura.
Para él, la espiritualidad permite a las personas reconocer sus limitaciones y dejar de proyectar expectativas irreales sobre el otro. «Es esencial entender que no todo lo que buscamos puede venir de nuestra pareja; hay una dimensión superior que nos da estabilidad y sentido», reflexiona.
Compromiso y resiliencia en las parejas cristianas
Cuando se le pregunta si los cristianos tienen mayor capacidad para mantener relaciones estables, Sanders responde que la espiritualidad proporciona un marco que fomenta la resiliencia y el compromiso. «La relación con Dios refuerza la seguridad de que no estamos solos en nuestra lucha. Eso nos da fuerzas para seguir adelante, incluso en tiempos difíciles», afirma.
Con esta visión, Sanders concluye que las parejas pueden superar los desafíos de la vida juntos, si comparten una base sólida de confianza, esfuerzo mutuo y fe. «El compromiso no significa perfección, sino un proceso constante en el que ambos se apoyan y se complementan a lo largo del tiempo».