La historia de los mártires de Damasco, que se negaron a renunciar a Cristo y unirse al Islam

Fueron canonizados el pasado domingo

La historia de los mártires de Damasco, que se negaron a renunciar a Cristo y unirse al Islam

El pasado fin de semana el papa Francisco canonizó a los conocidos como los «mártires de Damasco». La web de la Custodia en Tierra Santa ha dado a conocer los hechos que desembocaron en su martirio y una breve semblanza de cada uno de ellos.

(Custodia/InfoCatólica) El evento martirial se sitúa en un contexto de persecución contra los cristianos por los drusos chiítas, que a partir de la primavera de 1860 fue extendiéndose desde Líbano hasta Siria. El 9 de julio de 1860 una multitud fanática de perseguidores invadió el populoso barrio cristiano de Damasco que contaba con unas 3.800 viviendas, y dio rienda suelta a todo tipo de violencia, habiendo cerrado previamente todas las vías de escape. Esa misma noche, un comando de rebeldes animado por un odio religioso profundamente arraigado consiguió penetrar a través de una puerta oculta que les indicó un traidor en el convento franciscano de San Pablo: allí fueron brutalmente asesinados ocho Frailes Menores – siete de nacionalidad española y uno austriaco – y tres cristianos laicos maronitas.

Desde el momento de los hechos, fue evidente para todos que se trataba de una muerte martirial: de hecho, antes de infligirles brutalmente los golpes mortales, los agresores pidieron a las once víctimas que renunciaran a la fe cristiana y abrazaran el islam, invitación que fue rechazada con decisión.

La Custodia en Tierra Santa ha ofrecido algunas pinceladas sobre su biografía.

Manuel Ruiz López

Superior del convento, nacido en 1804 en San Martín de las Ollas, Burgos, España. Ingresó en 1825 en los Frailes Menores y fue ordenado sacerdote en 1830. Al año siguiente fue enviado a Tierra Santa donde, tras aprender las lenguas locales, llevó a cabo un fecundo apostolado. Obligado en 1847 a volver a Europa por motivos de salud, regresó a Tierra Santa en 1858. La noche de la masacre, en cuanto los rebeldes entraron en el convento, corrió a la iglesia para consumir las especies eucarísticas y fue asesinado al pie del altar. Sacerdote profeso de la Provincia de la Inmaculada Concepción, de los Menores Descalzos o Alcantarinos (1804-1860)

Carmelo Bolta Bañuls

Párroco, nacido en 1803 en Real de Gandía, Valencia, España. En 1825 fue recibido en los Frailes Menores y en 1829 fue ordenado sacerdote. En 1831 partió hacia Tierra Santa donde residió en los conventos de Jaffa, Damasco y Ein Karem, en el santuario de la Visitación. En 1851 fue trasladado a Damasco con el cargo de párroco y profesor de árabe. Sacerdote profeso de la Provincia de San Francisco de Valencia, de los Hermanos Menores Observantes (1803-1860)

Engelbert Kolland

Vicario parroquial, nacido en 1827 en Ramsau, Salzburgo, Austria. Entró en los Frailes Menores en 1847 y fue ordenado sacerdote en 1851. Llegó a Tierra Santa en abril de 1855. Desarrolló su apostolado misionero primero en el convento del Santo Sepulcro y luego en Damasco donde fue muy querido por la población. La noche de la tragedia fue el único de los religiosos que murió fuera del convento. Sacerdote profeso de la Provincia de San Leopoldo de Tirol, de los Menores Reformados (1827-1860)

Nicanor Ascanio Soria

Nacido en 1814 en Villarejo de Salvanés, Madrid, España. En 1830 ingresó en los Frailes Menores. Debido a la represión religiosa fue ordenado sacerdote en el clero diocesano. Con la reapertura del Colegio para las Misiones de Priego en Cuenca, pudo regresar con los Frailes Menores en 1858. Llegó a Tierra Santa en febrero de 1859 y fue destinado al convento de Damasco. La disposición al martirio fue una nota constante de su espiritualidad. Sacerdote profeso de la Provincia de Castilla, de los Hermanos Menores Observantes (1814-1860)

Nicolás María Alberca Torres

Nacido en 1830 en Aguilar de la Frontera, Córdoba, España. Anteriormente religioso de los Hermanos del hospital Jesús Nazareno de Córdoba, se unió a los Frailes Menores en 1856 y fue ordenado sacerdote en 1858. Llamado a la vida misionera, llegó a Tierra Santa en 1859 y fue destinado al convento de Damasco para aprender árabe. Sacerdote del Colegio Misionero de Priego (Cuenca), de los Menores Observantes (1830-1860)

Pedro Nolasco Soler Méndez

Nacido en 1827 en Lorca, Murcia, España. Después de algunas experiencias laborales ingresó a los veintinueve años en los Frailes Menores en 1856 y fue ordenado sacerdote en 1857. Al año siguiente presentó su solicitud para la misión de la Custodia de Tierra Santa donde llegó el 20 de febrero de 1859. Destinado en el convento de San Pablo en Damasco, pasó allí poco más de un año. Sacerdote del Colegio Misionero de Priego (Cuenca), de los Menores Observantes (1827-1860)

Francisco Pinazo Peñalver

Nacido en 1802 en el pueblo de El Chopo de Alpuente, Valencia, España. Fue admitido en el noviciado de los Frailes Menores en 1831. Como hermano laico ocupó el cargo de sacristán hasta 1835, año de la supresión religiosa en España. Para poder retomar la vida comunitaria, optó por la Custodia de Tierra Santa, donde llegó en octubre de 1843. Durante aproximadamente 17 años ejerció como cocinero y sastre en varios conventos. En el convento de Damasco, en el momento del martirio, trabajaba como sacristán. Religioso profeso de la Provincia de San Francisco de Valencia, de los Hermanos Menores Observantes (1802-1860)

​Juan Jacob Fernández

Nacido en 1808 en la localidad de Moire, Orense, España. En 1831 entró como hermano laico en los Frailes Menores. Lamentablemente, la supresión de 1835 interrumpió durante algunos años su experiencia de vida conventual. En 1858 pidió ser enviado a la Custodia de Tierra Santa. En 1859 se instaló en el convento de Damasco como cocinero. Religioso profeso de la Provincia de Santiago de Compostela, de los Hermanos Menores Observantes (1808-1860)

Francesco Massabki

Cristiano maronita, comerciante de sedas, era muy conocido en Damasco y estimado como un hombre honrado y piadoso. Casado y padre de ocho hijos, todos educados según los valores cristianos, en todas partes dio ejemplo de gran generosidad, especialmente hacia los pobres y los necesitados. Estaba vinculado con los frailes franciscanos, para los que actuaba como procurador. Junto con sus hermanos Mooti y Raffaele se encontraba en el convento de San Pablo en el momento del martirio.

Abdel Mooti Massabki

Vivía con su mujer y sus cinco hijos en la misma casa que su hermano mayor Francesco. Asistía diariamente al convento de San Pablo, tanto para la oración como para realizar actividades docentes en la escuela infantil local. Dispuesto a derramar su sangre por Cristo, como enseñaba en sus clases de catecismo, no dudó en ofrecer su vida en nombre de la fe.

Raffaele Massabki

Hermano menor de Francesco y de Mooti, soltero, prestaba de buen grado su ayuda a los frailes y a sus familiares; era muy devoto de la Virgen y pasaba mucho tiempo rezando en la iglesia del convento. Se encontraba todavía dentro de los muros del convento de San Pablo la noche entre el 9 y el 10 de julio cuando irrumpieron los drusos, que lo mataron junto con sus dos hermanos.

 

1 comentario

Jaime Gómez de Merodio
¿Pues no decían que daba igual de qué religión sea uno, que todas son queridas por Dios, que matar en nombre de Dios era horrible? Paco, aclárate miarma
22/10/24 9:44 AM

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