(Ecclesia/infoCatólica) El X Encuentro de obispos y agentes de la Pastoral Migratoria de Centroamérica, Norteamérica y el Caribe se celebra en un tramo clave de una de las rutas para migrantes más peligrosas del mundo: Panamá. Una de las consecuencias que ha traído la globalización, a pesar de tener múltiples beneficios, ha sido la migración, y la Iglesia tiene un papel fundamental al respecto y ha dejado clara su posición en el lema del encuentro: «Caminando junto al migrante y refugiado».
El encuentro comenzó el pasado lunes 19 de agosto y concluirá el viernes 23 de agosto en la Casa de Retiro Espiritual Monte Alverna. El objetivo que se busca en el encuentro es «fortalecer el marco de trabajo de la Iglesia en la protección y acompañamiento de quienes huyen de la violencia y la pobreza en sus países de origen». El Cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede, es quien ha liderado los trabajos que «tienen como criterio de fondo el balance del seguimiento de las normativas articuladas sobre los acuerdos y compromisos asumidos en el encuentro de agosto de 2023 en San Salvador.»
«Cualquiera de nosotros haría lo mismo»
Los obispos y sacerdotes realizaron una visita al Centro de Recepción Migratoria en Lajas Blancas, una de las rutas más peligrosas del mundo para los migrantes. El Cardenal Michael Czerny pronunció unas palabras que resumen perfectamente este encuentro frente a la situación de tantos migrantes obligados a abandonar sus hogares: «Es importante entender que, en situaciones extremas, cualquiera de nosotros haría lo mismo».
Los peligros que afrontan
El Cardenal Álvaro Leonel Ramazzini Imeri, obispo de Huehuetenango, Guatemala, y presidente de la Red Clamor, también confesó que: «Es estremecedor pensar en los peligros que estas personas, especialmente los más vulnerables, enfrentan diariamente en su búsqueda de una vida mejor». En el encuentro estuvieron presentes destacados líderes de la Iglesia, como el arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa Mendieta; Monseñor Pedro Joaquín Hernández Cantarero, obispo del Vicariato Apostólico de Darién; Monseñor Mark Joseph Seitz, obispo de la Diócesis de El Paso y presidente de la Comisión para Migrantes y Refugiados de la Conferencia Episcopal de EE. UU.; y Monseñor Carlos Alberto Santos García, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Monterrey, México, entre otros.
«Hay que buscar otra alternativa»
Con motivo del encuentro, se realizó una visita al Centro de Recepción Migratoria de Lajas Blancas, en la provincia de Darién. Ángel Expósito acudió allí y describió en Cope cómo es la ruta migratoria del Tapón de Darién, cuáles son los peligros que los migrantes encuentran en el camino y por qué lo hacen.
En este acto quedó constancia del papel fundamental del apoyo pastoral en la crisis migratoria de la región: «Es interesante ver las lanchas que llegan con gente de muchas partes del mundo... La cuestión no son los números, la cuestión es que hay que responder, no hay que dejar a la gente sin respuesta... Cuando la vida se presenta imposible, hay que buscar otra alternativa».
Obispos y Agentes de Pastoral Visitan Centro de Recepción Migratoria en Darién
— Arquidiócesis de Pmá (@ArquiPanama) August 19, 2024
En el marco del X Encuentro de Obispos y Agentes de Pastoral Migratoria de Centroamérica, Norteamérica y el Caribe, se realizó una visita al Centro de Recepción Migratoria de Lajas Blancas, ubicado en… pic.twitter.com/IYucyobJT5
