(CNA/InfoCatólica) Las autoridades militares irlandesas investigan el apuñalamiento de un sacerdote católico como un posible atentado terrorista, según informan este viernes los medios de comunicación.
Al parecer, el padre Paul Murphy fue apuñalado varias veces el jueves frente al cuartel .militar de Renmore, en la ciudad costera de Galway.
El sacerdote, de 50 años, sufrió heridas graves, pero que no ponen en peligro su vida, y fue trasladado al cercano Hospital Universitario de Galway para recibir tratamiento.
Al parecer, un joven de 16 años fue detenido en relación con el ataque.
El Primer Ministro irlandés, Simon Harris, declaró el viernes en X que había sido «informado del espantoso incidente ocurrido anoche frente al cuartel de Renmore» y que sus «pensamientos están con el miembro de las fuerzas de defensa hospitalizado».
«Quiero dar las gracias al personal de las fuerzas de defensa y a la Gardai por su actuación y respuesta», declaró el Primer Ministro.
El Irish Independent, por su parte, informó que el incidente está siendo investigado como un posible atentado terrorista. Los gardai irlandeses «están tratando de establecer si hubo un vínculo terrorista» con el ataque, informó el medio de comunicación el viernes.
La policía «está investigando si el adolescente pudo haber hecho comentarios en el lugar del apuñalamiento sobre la participación militar irlandesa en Oriente Próximo antes de que se lo llevaran los agentes», dijo el Independent.
Asimismo, el obispo de Galway, Michael Duignan, mencionó en un comunicado el viernes que la noticia era «profundamente impactante y perturbadora».
«Rezo por el herido, pidiendo a Dios que se recupere totalmente», dijo el obispo. «Rezo también por su familia, por sus compañeros del ejército y por el personal médico que atiende sus heridas en estos momentos».
Mientras tanto, a través de su cuenta oficial de Facebook, Murphy ofreció gracias a los seguidores «por sus oraciones, amor y preocupación».
«Siento no poder responder a todos los mensajes y atender todas las llamadas que me llegan», escribió el sacerdote. «Estoy bien; sólo a la espera de la cirugía».
«Todo irá bien», añadió.