(Asia News/InfoCatólica) La noticia fue recibida con alegría y entusiasmo por la comunidad y los dirigentes cristianos, y constituye un reconocimiento significativo para un miembro de una minoría que es a menudo víctima de persecución y discriminación en el país asiático de gran mayoría musulmana. Esta semana fueron ascendidos 22 altos oficiales. En un comunicado emitido por su oficina, el primer ministro Shehbaz Sharif expresó sus mejores deseos para la carrera del general de división James.
Mons. Azad Marshall, obispo anglicano de la diócesis de Lahore celebró este importante hito en las redes sociales. En su mensaje en X (ex Twitter) expresó la alegría de la comunidad y afirmó: «Es un día de inmenso orgullo para los cristianos paquistaníes, porque celebramos la promoción de una persona muy valiosa». Él, continúa la nota, está haciendo historia «como el primer oficial de mando cristiano en los 76 años de historia del Ejército, un »hito que llena de orgullo. Este resultado da testimonio de la dedicación, el duro trabajo y el compromiso del general de división James en su profesión. Le deseo las más ricas bendiciones».
Raja Saad, musulmán laico, escritor y activista, comenta: «Esta es una excelente noticia para el crecimiento de la comunidad paquistaní y también para la comunidad cristiana» porque supone un «cambio positivo» que se esperaba «desde hace 76 años» aunque se debió haber hecho «hace ya tiempo».
«Nuestra Constitución - añade - no permite que ningún cristiano, sij o hindú sea primer ministro o presidente del país». Por eso ahora hay una renovada esperanza de que »el general de división Julian Muazzam sea el primer paso de un largo camino en esta perspectiva y de que la decisión sea justamente valorada por la comunidad internacional. Espero que Pakistán -se convierta en el futuro en un país progresista y felicito de todo corazón al mayor general Julian y a toda la comunidad cristiana».
Entrevistado por AsiaNews el p. Abid Tanvir, vicario general de la diócesis de Faisalabad, dice que es una gran noticia», señal de que el Estado «ha comenzado a recompensar a la comunidad cristiana por sus servicios al progreso del país en el ámbito de la educación y de la salud. El alto oficial del Ejército se ha convertido en «un modelo y un héroe para nuestros jóvenes. Ha abierto el camino para que los jóvenes cristianos se incorporen al Ejército paquistaní con mejores oportunidades». Por último, el sacerdote espera que se modifique la Constitución «para que los candidatos de las comunidades minoritarias puedan ocupar puestos de alto nivel como gobernador, primer ministro y presidente».