(CNA/InfoCatólica) Los esfuerzos iniciales se concentrarán en atraer turistas para participar en las celebraciones de Semana Santa que se llevan a cabo cada año en la diócesis de Larantuka, así como en las festividades anuales organizadas por la Diócesis de Ruteng en honor a la Asunción de la Virgen María del 10 al 15 de agosto.
«Flores es famosa por su historia y herencia católica. También es conocida como la Isla Misionera; esta isla tiene un potencial y una atracción extraordinarios para el turismo religioso, especialmente a través de la inculturación de la Iglesia Católica y la cultura de la comunidad local,» declaró Sandiaga Salahuddin Uno, ministro de turismo y economía creativa de Indonesia, durante un seminario web organizado en mayo por la Agencia de Implementación de la Autoridad de Labuan Bajo Flores (BPOLBF).
Según el Jakarta Post, aproximadamente tres de los ocho millones de católicos en Indonesia viven en la provincia East Nusa Tenggara, con la mayoría residiendo en la isla de Flores. Aunque el catolicismo es una de las seis religiones oficiales reconocidas en Indonesia –junto con el islam, el protestantismo, el hinduismo, el confucianismo y el budismo– la población católica es una minoría religiosa que representa solo el 3% de la población total del país.
Cada año durante la Semana Santa, se lleva a cabo el evento católico más grande y antiguo de Indonesia: Los fieles procesionan con la estatua de madera de «Tuan Ma» (Madre María) en Larantuka, un subdistrito en el lado oriental de la isla de Flores. Esto ha tenido lugar durante 500 años.
Leyendas y relatos históricos indican que la estatua de Tuan Ma llegó a la orilla de la playa de Larantuka poco después de que la Virgen María se apareciera a un joven en 1510 y revelara su identidad escribiendo en la arena: «Akulah Reinha Rosari» («Soy la Reina del Rosario»). Aunque esta aparición del siglo XVI no tiene aprobación oficial del Vaticano, es la primera visión registrada de la Virgen María en la historia de Indonesia.
Durante la temporada de Pascua, después de la Semana Santa, también se lleva a cabo en Flores el Festival Bale Nagi para mostrar las habilidades y artesanías de más de 1,500 tejedoras que viven en la parte oriental de la isla, lo que atrae tanto a peregrinos religiosos como a turistas culturales.
El gobierno indonesio también ha expresado su apoyo para impulsar el turismo en Labuan Bajo, un pueblo pesquero en el lado occidental de Flores. El Festival Golo Koe, organizado anualmente por la Diócesis de Ruteng, se lleva a cabo del 10 al 15 de agosto en honor a la Asunción de María. El evento principal del festival es la solemne misa celebrada el 15 de agosto.
Además de la celebración de la misa y la procesión de María de la Asunción, Golo Koe incluye desfiles que muestran música y danzas locales, así como exposiciones de artes culturales y culinarias durante los seis días del evento.
«La diócesis de Ruteng ha diseñado y continúa promoviendo el turismo holístico (sic) en la región,» dijo el obispo Siprianus Hormat de Ruteng al Jakarta Post. «El turismo debe construirse y evolucionar desde las raíces de la cultura local y la espiritualidad local.»
La web de la diócesis de Ruteng afirma que el Festival Golo Koe está incluido en la lista de «Eventos de Carisma Nacional 2024» de Indonesia, haciendo oficialmente del festival un proyecto de turismo colaborativo con el Ministerio de Turismo y Economía Creativa de Indonesia.
«Colaboremos para que esta actividad tenga un mercado extraordinario que atraiga a todos, de modo que en el futuro los turistas vengan en masa para participar en una serie de actividades del Festival Golo Koe,» dijo Edistasius Endi, regente de West Manggarai, el gobierno local de la regencia, a Radio Republik Indonesia.
El Jakarta Post informó que también hay planes para promover visitas a otras iglesias repartidas por toda la isla desarrollando rutas de peregrinación católica para atraer tanto a turistas religiosos indonesios como internacionales de países vecinos como Filipinas, Malasia, India y Singapur.
