(Cope/InfoCatólica) El templo, situado en el centro de Valladolid, afrontaba desde hace semanas un proceso de rehabilitación por el deterioro provocado por las humedades en la cúpula que se ha terminado cayendo hoy martes.
Seis operarios realizaban tareas en la zona de la cúpula cuando «se ha derrumbado a plomo». Ninguno ha sufrido daños personales, tampoco las imágenes que custodia la Iglesia de la Vera Cruz como el Cristo atado a la columna, Ecce Homo, la Dolorosa de la Vera Cruz, todas ellas de Gregorio Fernández. En ella se encuentra también 'La borriquilla', el paso más antiguo de Semana Santa de la ciudad de Valladolid. Un agujero de 12 metros de diámetro deja al descubierto el templo. La linterna ha caído desde una altura de 24 metros.
Con el tempo al descubierto, amenaza de lluvia. El arquitecto encargado explica que no hay riesgos para las imágenes, incluso podría venir bien para asentar los escombros.
Cofrades desolados
Una cofradía desolada por el derrumbe, pero aliviada por que no se hayan registrado daños personales. La secretaria de la Vera Cruz, Beatriz Tovar, ha señalado que no ha habido daños porque estaban protegidos por hornacinas.
El traslado de las imágenes se realizará cuando los técnicos lo determinen porque ahora las tareas se centran en desescombrar antes de reiniciar la actuación que una cúpula que no volverá a ser la misma.
Ayuntamiento y subdelegación del gobierno, así como el resto de cofradías, se han puesto a disposición de la Vera cruz para colaborar en la reparación de todos los daños materiales que se hayan producido en el templo, así como para acoger las imágenes durante las obras de reparación.
La Iglesia de la Vera Cruz se encuentra en la calle Platerías, y su fachada constituye una de las estampas más tradicionales de la ciudad. Sede y propiedad de la Cofradía del mismo nombre, la más antigua de las penitenciales vallisoletanas, comenzó a construirse en el último cuarto del siglo XVI. Fue reformada en la segunda mitad del siglo XVII.