(Aica/InfoCatólica) El encuentro se desarrolló en el marco de la peregrinación diocesana que monseñor Matteo Zuppi, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) y arzobispo de Bolonia, encabezó a Tierra Santa, acompañado por 160 participantes, también procedentes de otras ciudades italianas.
«Debemos esforzarnos por crear un futuro posible para estos niños. Cuando los miramos a los ojos, entendemos nuestras responsabilidades. El odio, la lógica implacable de la violencia y la incapacidad de reconocer el sufrimiento de los demás, centrándonos sólo en nuestro propio dolor: todo esto perpetúa más violencia y acaba con más vidas inocentes, especialmente entre los niños», afirmó el cardenal.
Shireen Khamis, del departamento de comunicación del hospital explicó a Vatican news que para llegar a Belén es necesario pasar por cientos de puestos de control israelíes y que «en los tres primeros meses de la guerra, siete mil niños no pudieron recibir tratamiento por este motivo».
«Además, la guerra exacerbó problemas económicos que ya eran graves. Sin turismo y peregrinaciones, muchas familias han perdido sus empleos y no pueden pagar el tratamiento», añadió.
Mientras continúa la guerra en Gaza, empeorando la situación en la región, más de 410.000 niños menores de 18 años están sujetos a condiciones difíciles en diversas zonas, según el portal de noticias del Vaticano.
Aunque está lleno, Caritas Baby Hospital ha hecho todo lo posible para ayudar a los niños enfermos. «A mediados de marzo», afirma Khamid, «un grupo de 68 niños de la Franja de Gaza llegó a Belén», fueron acogidos «en un centro especializado» y ahora están «siendo atendidos por la organización Aldeas Infantiles SOS, mientras la atención médica la brinda el hospital».
Durante la visita al hospital, el cardenal Matteo Zuppi, guiado por la hermana Aleya Kattakayam, visitó las distintas salas, saludó, abrazó y dejó palabras de consuelo para los niños hospitalizados y sus padres, y también habló con el equipo médico.
«Estamos en un lugar donde el sufrimiento de tantos niños encuentra una cura. Pero no siempre es así», destacó el enviado del Papa para las misiones de paz, mencionando que es necesario empezar a comprender qué necesitan las personas más jóvenes y frágiles para que puedan tener todo lo que les corresponde.
«El sufrimiento de los niños es inaceptable y aquí hay que intentar hacer entrar en razón a los adultos», destacó.
El cardenal recordó a los niños israelíes asesinados en octubre de 2023, cuando comenzó la guerra en Oriente Medio, y a los niños palestinos que murieron durante estos ocho meses en Gaza.
Monseñor Matteo Zuppi recordó haber escuchado a pacientes que contaban las experiencias «terribles» que habían vivido, como «amputaciones sin anestesia».
El cardenal destacó la esencia de su visita, diciendo que se esfuerza por comprender los dolores de la guerra y afrontarlos «con amor unido, estando cerca, ofreciendo ayuda y rezando fervientemente por la valentía para alcanzar un alto el fuego y continuar urgentemente el diálogo».