(Marta Zhao/Agencia Fides) Según los datos fragmentarios recogidos en la preciosa «Guía de la Iglesia católica en China», editada por el gran misionero francés Jean Charbonnier (1932-2023), en la China continental existen seguramente más de 200 parroquias, iglesias y capillas dedicadas al Sagrado Corazón, aunque en realidad no podemos conocer el número exacto. Entre todas ellas se encuentra la catedral de la archidiócesis de Guangzhou, quizá la más bella y solemne de todas las catedrales de China. Además, actualmente se siguen dedicando nuevas iglesias al Sagrado Corazón de Jesús, como la consagrada en junio de 2023 en la diócesis de Wenzhou.
Según el periódico católico de Shanghai «Shengxin (Sagrado Corazón)», publicado de 1887 a 1949, fue el padre jesuita Jean Charles de Broissia quien introdujo la devoción al Sagrado Corazón en China. Pero la difusión de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús en tierras chinas se debió principalmente a su hermano de religión Romain Hinderer (1668-1744), que construyó la primera gran iglesia dedicada al Sagrado Corazón entre 1722 y 1732 en la ciudad de Hangzhou (donde hoy se alza el parque mausoleo de otro gran jesuita italiano, el historiador, geógrafo y cartógrafo Martino Martini, que vivió de 1614 a 1661).
Marta Zhao continúa su reportaje en para la Agencia Fides relatando que los verbitas también han contribuido en gran medida a difundir la devoción al Sagrado Corazón de Jesús entre los católicos chinos. Desde el fundador San Arnoldo Janssen hasta San José Freinademetz, todos los misioneros verbitas han encontrado siempre consuelo en la misericordia divina derramada sobre la humanidad a través del Sagrado Corazón.
Hoy en día, la devoción al Sagrado Corazón de Jesús forma parte del tejido de la vida cristiana compartida en la vida ordinaria de las comunidades católicas chinas. Una dinámica espiritual que se manifiesta especialmente en el mes de junio, mes que el Pueblo de Dios dedica al Sagrado Corazón, en todas las partes del mundo.
La Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús está vinculada a la Fiesta del Corazón Inmaculado de María, vivida como una llamada de Cristo y de su Madre a seguir el camino de Jesús en la vida cotidiana. Hay laicos que consagran toda su familia al Sagrado Corazón, mientras que los sacerdotes viven la Jornada de Santificación Sacerdotal en su solemnidad litúrgica. Además, en el hogar de cada familia católica china hay al menos una imagen del Sagrado Corazón).
Como todos los años, en este mes de junio son muchos los testimonios de este camino espiritual intenso, que llegan continuamente a la Agencia Fides.
Como por ejemplo, en la parroquia del Sagrado Corazón de Quxi, Ouhai, en la diócesis de Wenzhou, cada domingo de junio más de 350 bautizados, después de la solemne procesión desde el convento de las religiosas de Santa Teresita, participan en la Eucaristía y rezan juntos el Rosario, compartiendo además encuentros y catequesis dedicados a la devoción del Sagrado Corazón.
La congregación diocesana femenina del Sagrado Corazón de Guizhou acaba de acoger la profesión perpetua de la hermana Fausta Tao Guangying. Paul Xiao Zejiang, obispo de la diócesis de Guiyang (capital de la provincia de Guizhou) ha apreciado la elección de la religiosa porque «se hace eco de la invitación evangélica de Jesús a los jóvenes a abandonar todo lo que les es querido, algo que sólo puede hacerse sin reservas en Cristo, con Jesús como tesoro supremo». En la Jornada de Santificación Sacerdotal, el obispo Paul Xiao ha ordenado a dos sacerdotes durante una liturgia a la que han asistido más de 600 católicos.