(ReMix/Infocatólica) Según cifras publicadas por la Dirección de Educación y citadas por el portal de noticias Exxpress, el 35% de los alumnos de primaria son musulmanes, mientras que el 21% son católicos, el 13% ortodoxos y el 2% protestantes o pertenecen a otra confesión. Algo más de uno de cada cuatro alumnos (26%) se clasifica como no religioso.
Las cifras muestran un aumento considerable del número de niños musulmanes que frecuentan las escuelas primarias austriacas en comparación con los datos publicados para el curso 2016/2017, cuando los católicos seguían siendo el grupo religioso más numeroso, con un 31 por ciento, frente al 28 por ciento de musulmanes.
El teniente de alcalde de la capital austriaca Christoph Wiederkehr, que también es concejal de Educación, rechazó las sugerencias de que el aumento debería ser motivo de preocupación.
«La fe es un asunto privado y la libertad de creencia o libertad religiosa es un bien muy valioso», declaró a los periodistas el martes.
La encuesta también muestra que los jóvenes musulmanes son muy religiosos y la mayoría son miembros practicantes activos en sus respectivas mezquitas. «Como resultado, tienden a tener actitudes más despectivas hacia temas como el antisemitismo, la hostilidad hacia el colectivo LGBT o la igualdad entre hombres y mujeres», indica Exxpress.
Kenan Güngör, sociólogo y experto en diversidad que asesora al gobierno austriaco en materia de integración, ha pedido que se modifiquen los planes de estudio para dar cabida a lecciones que promuevan los valores democráticos desde una edad temprana, con el fin de combatir las enseñanzas que se imparten fuera de las aulas.
«Cada vez hay más personas que se convierten al Islam, y tienden a ser más radicales», advirtió Güngör.
Dijo que las lecciones que enseñan democracia, ética y valores deberían ser obligatorias desde el primer curso, explicando que una «creencia común» en Austria es la democracia y que ésta debería inculcarse a todos los alumnos, independientemente de su afiliación religiosa.
En abril, Christian Klar, director de un centro de enseñanza media de Viena, se refirió a la creciente intolerancia hacia los grupos minoritarios entre la creciente población estudiantil islámica que frecuenta su centro.
«El noventa por ciento de los niños de aquí son de origen inmigrante, y bastante más de la mitad son islámicos», declaró al portal de noticias austriaco Heute.
Explicó que algunos alumnos se convierten al Islam para evitar ser acosados por lo que ahora es un grupo mayoritario dentro de la escuela.
«Los que no sufren acoso quieren convertirse al islam. Aquí tengo alumnos que dicen: 'Hay que matar a los gays, y punto'. O me dan un libro de texto que dice en la contraportada: 'El Islam vencerá'. También hay quien dice abiertamente: 'De todos modos, tendremos más hijos. Es sólo cuestión de tiempo'».