(Aica/InfoCatólica) El P. Cabrera, desde el comienzo de su sacerdocio, ha integrado el lenguaje de señas en la celebración de la Santa Misa y otros sacramentos, tanto en encuentros presenciales como en transmisiones virtuales a través de YouTube, buscando siempre adaptar la liturgia a las necesidades de las personas con hipoacusia.
Tal y como explica en una entrevista concedida a Aica, su vocación al sacerdocio no fue muy temprana; aunque criado en un hogar creyente, su camino hacia el sacerdocio comenzó realmente en la universidad, donde, a pesar de sus planes originales en bioquímica, la reiterada inquietud sobre su llamado religioso finalmente lo llevó a dialogar con un sacerdote y a comenzar un proceso de discernimiento que, tras varios años y un segundo proceso más rápido, concluyó con su entrada al seminario.
El presbítero relata que su enfoque hacia la comunidad sorda comenzó incluso antes de su formación formal en el seminario. Una misa durante la cual una niña sorda no podía entender lo que ocurría fue el catalizador que lo impulsó a aprender el lenguaje de señas. Este aprendizaje se consolidó a lo largo de sus estudios y fue enriquecido por interacciones con profesores sordos, quienes le ayudaron a interpretar adecuadamente los textos litúrgicos al lenguaje de señas.
Desde el comienzo de su ministerio, Cabrera ha organizado misas especialmente diseñadas para la comunidad de hipoacúsicos, siendo testigo de momentos profundamente conmovedores como el de un anciano que, por primera vez, comprendió la misa gracias a la interpretación en lengua de señas. Además de la misa, Cabrera ha adaptado la catequesis y sacramentos como bautismos, matrimonios y el sacramento de la Reconciliación para ser accesibles a los sordos, destacando la importancia de una verdadera inclusión dentro de la práctica de la fe.
La labor del padre Cabrera ha trascendido el ámbito local gracias a la difusión de las misas en lengua de señas por YouTube, una iniciativa que empezó hace aproximadamente un año y que ha alcanzado a personas en distintas provincias e incluso en otros países. Esta expansión se ha visto favorecida por la decisión de añadir subtítulos y doblaje a las grabaciones, lo que ha incrementado significativamente su impacto y visibilidad.
Finalmente, Cabrera enfatiza la necesidad de que la Iglesia continúe avanzando hacia una mayor inclusión de la comunidad sorda, señalando que ya existe un buen nivel de apoyo diocesano y de otros sacerdotes. Con una mirada hacia el futuro, aspira a seguir aprendiendo y perfeccionando su manejo del lenguaje de señas y a mantener su compromiso con las necesidades de la comunidad sorda, en una muestra clara de la misericordia y el amor de Dios.
Se recomienda a todos los interesados en su misión seguir las celebraciones y reflexiones a través del canal de YouTube de María Studios y su cuenta de Instagram.