(InfoCatólica) Se sabe que esta antífona mariana se cantaba ya desde el siglo XII, y en el siglo XIII los franciscanos la difundieron por todo el mundo.
Como muchas oraciones, el Regina Coeli (latín) toma su nombre de las primeras palabras que componen la oración. Significan: “Reina del Cielo”, y hacen referencia a uno de los Misterios Gloriosos del Santo Rosario: la Coronación de la Santísima Virgen como Reina y Señora de todo lo creado.
¿Quién compuso esta oración?
La tradición atribuye su autoría a los mismísimos ángeles. Una antigua leyenda cuenta que San Gregorio Magno habría escuchado los tres primeros versos cantados por ángeles mientras caminaba descalzo una mañana en una procesión en Roma. Inspirado por tal melodía celestial, agregó el último verso, un ruego a la Virgen clamando su intercesión ante Dios por la Iglesia peregrina. Sin embargo, también ha sido atribuido a Gregorio V, aunque sin sólido fundamento.
La misma leyenda que atribuye su autoría a San Gregorio Magno, Papa entre los años 590 y 604 d.C., narra el contexto de una Roma golpeada por una plaga. La inspiración angélica que testifica esta antigua tradición se dio en el marco de una procesión por las calles de Roma con propósito de poner fin a la pandemia. Cuenta la leyenda que la oración tuvo éxito erradicó definitivamente la plaga.
¿Cuándo y cómo se reza el Regina Coeli?
Al igual que el Ángelus, el Regina Coeli se reza tres veces al día: al amanecer, al mediodía y al atardecer.
El Regina Coeli sustituye el rezo del Ángelus durante el tiempo pascual. Litúrgicamente está prescrita en el Breviario Romano desde las completas del Sábado Santo hasta la hora nona del sábado posterior a Pentecostés.
Puede recitarse o cantarse, siempre de pie «como corresponde a los vencedores de la muerte» según San Agustín, del mismo modo que se reza de pie el Magnificat en la oración de Vísperas y el Benedictus en la de Laudes.
Texto en español
V/. Reina del Cielo, alégrate; aleluya.
R/. Porque el que mereciste llevar en tu seno; aleluya.
V/. Resucitó según dijo; aleluya.
R/. Ruega por nosotros a Dios; aleluya;
V/. Gózate y alégrate, Virgen María; aleluya.
R/. Porque resucitó en verdad el Señor; aleluya.
Oración:
¡Oh, Dios!, que te dignaste alegrar al mundo por la Resurrección de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo: concédenos, te rogamos, que por la mediación de la Virgen María, su Madre, alcancemos los gozos de la vida eterna. Por el mismo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.
Texto en latín
V/. Regina cæli, lætare; alleluia.
R/. Quia quem meruisti portare; alleluia.
V/. Resurrexit sicut dixit; alleluia.
R/. Ora pro nobis Deum; alleluia.
V/. Gaude et lætare, Virgo Maria; alleluia.
R/. Quia surrexit Dominus vere; alleluia.
Oremus:
Deus, qui per resurrectionem Filii tui Domini nostri Iesu Christi mundum lætificare dignatus es, præsta, quæsumus, ut per eius Genetricem Virginem Mariam perpetuæ capiamus gaudia vitæ. Per eundem Christum Dominum nostrum. Amen.